Prepararse para la vida

Por: José I. Delgado Bahena

Estamos a una semana de que inicien las vacaciones decembrinas y, con frecuencia, los estudiantes se desentienden de las labores escolares, es lógico; pero, los padres que entienden que en ningún momento se deben descuidar las acciones de aprendizaje, saben que es importante retomar estrategias básicas que todo estudiante debe seguir si quiere ser un profesionista exitoso.

Desde luego, tengo que referirme a la que, sin lugar a dudas, es prioritaria en la adquisición del conocimiento de todas las materias: la lectura.

Nadie puede negar los grandes beneficios que aporta al ser humano la adquisición del hábito de leer desde temprana edad, y no soltarlo aun cuando ya se tenga una profesión y se desempeñe en el ámbito laboral.

Quiero decir, pues, que no debemos leer, solo, por obligación; nuestro intelecto necesita nutrirse permanentemente, y para lograrlo, como padres de familia, debemos inculcar a nuestros hijos el gusto por los libros, de la materia o temática que sea; lo que necesitemos leer, o lo que queramos leer, estará bien si se decide por libros de ciencia, de aventuras, de poesía, de terror, de consulta, etc.

Al hacer que los niños y jóvenes lean, les causará una adicción que los convertirá en seres pensantes, persuasivos, creativos, imaginativos y sensitivos. Pero, si usted prefiere que sus hijos sean adictos al teléfono celular, a los videojuegos, a la televisión… entonces NO DEJE QUE SUS HIJOS LEAN LIBROS porque los alejará de los distractores que le acabo de mencionar.

Pero, ¿cómo lograr que sus hijos adquieran el hábito de la lectura? Mire: aquí le dejo algunas recomendaciones:

1.- Forme en su hogar una pequeña biblioteca y deje a sus hijos que escojan sus libros cuando visiten una librería. Incentívelos comprando uno para usted.

2.- Lea en casa para dar ejemplo a sus hijos. Si usted es lector, sus hijos serán lectores.

3.- Cada noche aparte un tiempo de lectura familiar antes de dormir. Comenten el contenido.

4.- Lea en voz alta a los niños que aún no saben leer. Ayúdelos a hacer predicciones sobre lo que están leyendo, que intuyan sobre lo que sigue.

5.- Después de leer un libro, realice alguna actividad relacionada sobre el tema, para despertar en los niños el interés en la investigación.

6.- Al terminar la lectura de un libro, dense un premio: un paseo o una salida a comer.

7.- Además de juguetes y ropa, regáleles libros.

8.- Varíe el tipo de libros que se leen en casa.

9.- Organice el tiempo de lectura sin que interfiera el tiempo de algún programa de televisión que puedan seleccionar como favorito.

10.- Participen en juegos de mesa que tengan que ver con la lectura. Pueden apoyarse en alguna enciclopedia. El Maratón es muy recomendable.

11.- Utilice también revistas y periódicos como material de lectura. Haga una selección con mucho cuidado.

12.- Permita que sus hijos guarden sus libros donde ellos quieran y motívelos a que los compartan.

13.- Cuando haya una película basada en un libro (adecuada para los niños), llévelos a verla cuando hayan terminado de leer el libro, y coméntenla.

Si sigue algunas, o varias, de estas recomendaciones, no solo tendrá a sus hijos organizados y entretenidos, sino que LOS ESTARÁ PREPARANDO PARA LA VIDA.

Considere que si usted está leyendo el periódico, aunque sea en forma digital, es PORQUE SABE LEER; pero no basta saber hacer una cosa, hay que usar ese aprendizaje en nuestro beneficio.

Está claro que, lamentablemente, en Iguala, apenas se está reconstruyendo la biblioteca pública, pero tenemos, al menos, cuatro librerías donde puede acudir con sus hijos para VER CÓMO ESTÁN ORGANIZADOS los materiales de lectura. Y ya que están allí, adquirir algún libro.

Además, con frecuencia llegan vendedores ambulantes de libros. Se pueden aprovechar las promociones que ellos traen.

Recuerde: nadie hará por sus hijos lo que usted no haga por ellos.