Poesía y tradición
Por: José I. Delgado Bahena
Permítame, amable lector, abordar el tema relacionado con la composición poética sobre el que salió la primera convocatoria por parte del Museo de la Bandera y Santuario de la Patria, respaldada por la Secretaría de Cultura del estado, para participar con un poema dedicado a nuestro lábaro patrio.
Entre otras de las bases, se estableció, en dicha convocatoria, que fuera inédito; es decir: que de ningún modo se hubiera dado a conocer antes; además, señala sobre la extensión del texto: de treinta a cuarenta versos; es decir: mínimo y máximo. Por supuesto, como se pide en este tipo de certámenes, se pidió que fuera firmado con un seudónimo, así mismo que los datos, junto con la documentación requerida, se adjuntaran en un sobre cerrado; a la información contenida en este sobre, se le denomina “plica”, para mantener el anonimato del autor y evitar suspicacias; así, los jueces que integran el jurado, no tienen conocimiento del nombre de los participantes.
Sin embargo, por sobre estas consideraciones, lamentablemente, de los diecinueve trabajos recibidos, algunos han sido descalificados por no acatar las indicaciones de las bases; por ejemplo: a alguno le faltaron cuatro versos, mientras a otro le sobraron (el poema consta de ciento veinte versos distribuidos en treinta cuartetos); a otros más les sobraron siete y seis versos…
Inclusive hay uno que ya ha sido dado a conocer en Facebook, por lo que no cumple con la base que solicita que sea inédito.
También un par de ellos están en la lista de descalificados por no cumplir con el anonimato: en el sobre aparece el nombre real del participante.
Dije que es lamentable, porque, como coordinador, tuve la oportunidad de leer algunos fragmentos de los poemas participantes y, la verdad, da gusto encontrar tanto talento local, sobre todo en la literatura y, más al tratarse de la poesía.
He reconocido que, de mis libros, lo que más vendo son las novelas, le siguen los cuentos y al último los libros de poesía. Por eso me da gusto que la inspiración y las musas nos sigan motivando para crear poesía. Ahora que, bueno, la bandera es un buen motivo para echar a volar la imaginación y recrear el mundo de las palabras para elaborar metáforas y, con el uso de los recursos que este género tiene, elaborar textos con elegancia, vocación histórica y amor por nuestra tierra y los símbolos que tenemos como mexicanos.
En fin: ya están en manos de los integrantes del jurado los trabajos que sí cumplieron con los requisitos, y están valorando los aspectos de la rúbrica, como: que sea original, que trasmita emoción, utilice recursos propios de la poesía, que el título corresponda al tema, un vocabulario adecuado y pulcro, en cuanto a ortografía, etc.
Como dije: tuve la oportunidad de leer algunos párrafos y descubrí que hay mucho apego a nuestras tradiciones, a nuestra historia, a nuestros símbolos. Se advierte el amor con el que fue escrito cada verso de cada poema, proyectando el orgullo por nuestra querida bandera tricolor, la que fue reconocida como la más hermosa del mundo.
Ojalá que este tipo de concursos se sigan convocando, por la instancia que sea, ya que promueven la creatividad y, con los premios económicos que se dan, aunque sean mínimos, apoyan un poco a los artistas.
A propósito: ha salido la convocatoria para participar en los Juegos Florales que tradicionalmente se llevan a cabo con motivo de la Feria de la Bandera, hay que consultar las bases y participar; el premio aquí es mayor: de treinta mil pesos, ojalá que lo gane un igualteco. Yo tuve esa fortuna en 2018 y es muy emocionante vivir esa experiencia. Solo que, por favor, hay que leer bien las bases y cumplir con ellas, para no correr el riesgo de la descalificación.
Y bueno, por último: los invito a disfrutar de la feria y no dejar de asistir a los eventos culturales, tanto en el Teatro del Pueblo, como en el Tehuehue.