Ataques simultáneos, fuga de criminales, asesinato de políticos y la guerra del narco sumen a Ecuador en el terror 

Por: Servicios AINI

El crimen organizado, la violencia en las cárceles y los atentados con explosivos han sumido a Ecuador en un profundo caos. Este martes el país ha vivido una jornada de terror con el ataque simultáneo de grupos armados que han sembrado el miedo entre los ciudadanos, han asaltado centros comerciales y han tomado el control de las calles. La imagen más evidente de esta crisis se ha producido cuando el crimen organizado ha irrumpido en plena transmisión en directo en un canal de televisión de Guayaquil.

La segunda ciudad de Ecuador ya es el epicentro de los ataques de bandas criminales que las autoridades han tachado de «terroristas». Pero, ¿qué está pasando en un país, azotado por una guerra interna, que hace apenas tres meses eligió al presidente Daniel Noboa tras una campaña electoral marcada por el asesinato de varios candidatos, entre ellos el aspirante presidencial Fernando Villavicencio? He aquí algunas claves para ayudar a comprender esta crisis:

• Un conflicto armado interno: Daniel Noboa declaró este martes la existencia de un «conflicto armado interno» en el país y ordenó a las Fuerzas Armadas ejecutar acciones militares, después de que un comando fuertemente armado ocupara durante varias horas el canal público de Guayaquil TC Televisión, se produjeran motines en seis cárceles y se registraran otros actos violentos en Quito y varias ciudades más.

• Crisis carcelaria: La víspera, el lunes por la noche, Noboa había declarado estado de excepción y el toque de queda durante 60 días, tras la «desaparición» del peligroso capo Adolfo Macías Fito, líder de la banda criminal Los Choneros y los motines en seis cárceles ecuatorianas. La fuga se produjo cuando estaba sobre la mesa el traslado de Fito a un centro penitenciario de máxima seguridad.

• Objetivo militar: El jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas de Ecuador, Jaime Vela, ha advertido de que todo grupo terrorista es un objetivo militar. El mensaje va dirigido a una veintena de grupos del crimen organizado mencionados por el presidente Noboa en la declaración de conflicto armado interno. La advertencia del alto mando militar de que no darán ni un paso atrás ante el terrorismo se produjo tras un Consejo de Seguridad urgente con la participación de los tres poderes del Estado y las Fuerzas Armadas y de Seguridad.

• Asalto en directo: Un comando de 13 individuos armados hasta los dientes, con rifles, granadas y explosivos, han irrumpido en el canal público de Guayaquil TC Televisión en pleno directo de un informativo. Los atacantes amenazaron a los periodistas y les exigieron que pidieran al presidente Noboa que no mandara a la policía. La toma de la televisión concluyó con la entrada en las instalaciones de cuerpos especiales, que detuvieron a los delincuentes y liberaron a los rehenes.

• Ocho muertos en Guayaquil: La operación de rescate se saldó sin víctimas, pero el pánico se ha extendido por las calles, colegios y comercios de la ciudad, donde ha habido ocho muertos y dos heridos por los disparos de encapuchados a viandantes y vehículos y la toma de un comercio. La policía tuvo que enfrentarse a más de 600 emergencias y defender al personal en varios hospitales asaltados. Las calles de Guayaquil han quedado desiertas.

• Ni rastro de Noboa: El presidente de la República de Ecuador, Daniel Noboa, no se ha dejado ver en público desde que el lunes difundiera un vídeo con la declaración del estado de excepción y el toque de queda, a pesar de la gravedad de los acontecimientos en varias ciudades del país.

• Ayuda exterior: Los gobiernos americanos. organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Comunidad Andina y organizaciones no gubernamentales como Human Rights Watch (HRW) han condenado la ola de violencia. Algunos países se han ofrecido incluso a apoyar a las autoridades de ese país con el envío de efectivos armados si fuese necesario.

• Concesión de indultos: La Asamblea Nacional de Ecuador ha expresado su respaldo a las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional y los funcionarios encargados de mantener la seguridad y la paz frente a la ola de violencia y ha anunciado que adoptará «indultos y/o amnistías» en los casos que sean necesarios para garantizar que puedan cumplir su tarea.