Por: Fernando Polanco Ochoa

El Monitor de Violencia de género de la Red Guerrerense de Violencia contra las Mujeres, registró de enero a la fecha por lo menos 75 casos de homicidios dolosos, con presunción de feminicidio. Marina Reyna Aguilar, presidenta de la Red Guerrerense, advirtió que hay otra «cifra negra» porque existen casos no reportados ni denunciados por los familiares de las víctimas. «Ni siquiera hay alguna forma de visibilizarlos, porque sencillamente, no se denuncia», dijo.

En entrevista informó de un caso reciente en el municipio de José Joaquín de Herrera, región Montaña, donde una mujer fue agredida físicamente por su pareja, pero sus familiares solo la trasladaron para su atención médica, y finalmente la regresaron a su localidad donde falleciera a consecuencias de los golpes. Señaló que por miedo, la familia de la víctima decidió no denunciar al agresor, por lo que no se contó con los elementos para investigar, a fin de que fuera sancionado por las autoridades.

 «Yo les ofrecí ayuda para denunciar, pero decidieron no hacerlo por miedo; creo que es grave la situación de la violencia contra las mujeres, y no está disminuyendo, al contrario, está aumentando», advirtió. Consideró también que es en los municipios de la región de La Montaña donde menos se denuncian los casos de violencia contra las mujeres, mismos que muchas veces terminan en feminicidios. De enero a la fecha.

La organización registra 75 homicidios dolosos contra mujeres, con presunción de feminicidio, aunque el Secretariado Ejecutivo en materia de Seguridad «diga otra cifra más baja, lo cierto es que no hay garantías de seguridad para nosotras las mujeres».

Recordó las dos alertas de violencia de género para nueve municipios del estado, que tienen el mayor compromiso de garantizar la seguridad a favor de las mujeres, porque de manera constante son evaluados por la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim).