Por: Álvaro Venegas Sánchez
La convocatoria al paro de actividades escolares el martes 19 de marzo de parte de la Sección 14 del SNTE cayó de sorpresa a la mayoría del magisterio guerrerense y a padres de familia. Los agremiados sabían de asuntos acordados pendientes de solución y de la problemática laboral histórica; empero desfavoreció el escaso conocimiento del plan de protesta. La directiva sindical necesitaba demostrar el liderazgo y la legitimidad de su investidura. Prisa e improvisación determinaron una participación parcial de los representados.
Los trabajadores de la educación atendieron el llamado de concentrarse en las sedes regionales de servicios educativos. Los ahí presentes recibieron otra sorpresa: el paro, ante la desatención de las autoridades a la Comisión Negociadora, la dirigencia lo declara Indefinido e inició la toma formal de oficinas. Enseguida anuncia e invita a una marcha para el día siguiente, miércoles 20. En el curso del mitin realizado en esta ciudad, como parte de la información y para continuar la suspensión de clases citan concentrase el jueves 21 nuevamente en las sedes regionales de la SEG anticipando la presencia del secretario general Silvano Palacios Salgado.
En su momento el dirigente seccional, previa presentación de un audio para ilustrar el trato y comportamiento de funcionarios de la Secretaría de Educación Guerrero, cuya salida exigió, expuso los motivos por los cuales la directiva sindical dio un golpe en la mesa y se retiró de las pláticas. Argumentó estar en desacuerdo querer seguir discutiendo asuntos tratados en mesas de trabajo anteriores, incluso con minutas firmadas de por medio.
A groso modo refirió temas como que el de las licencias por Artículo 43 por asuntos particulares. La SEG, dijo, la suspendió sin dar explicación. Igual ocurrió con el acuerdo en favor del personal de apoyo (intendentes, administrativos) para que el trabajador al jubilarse proponga para cubrir la Plaza que deja a un familiar directo; la prestación de 30 mil pesos del CEBE a docentes que se jubilan no la cubren desde hace varios años, en cambio la hacen efectiva de forma excepcional a los que ciertos funcionarios quieren. Además de casos como éstos denunció la soberbia y arrogancia de servidores públicos menores. Al final, informó que, con la acción de ese día, la protesta terminaba ante la cercanía de las vacaciones; pero exhortando al magisterio a prepararse porque: “si no hay solución, no habrá reanudación”.
El amago de Palacios Salgado, remarcado al reconocer avance de acuerdos con la SEP, pero no así con la SEG tuvo efecto. Pesó en la coyuntura política merced al proceso electoral. La mandataria del estado Evelyn Salgado Pineda, tuvo que atender y el diálogo con la representación de la Sección 14 llegó a feliz término. Hoy, 8 de abril, el servicio educativo en Guerrero se reanuda con normalidad.
Los 22 acuerdos pactados para resolver el conflicto habrían sido satisfactorios a juicio de la directiva sindical. Con procedimientos, plazos y fechas para evitar otro golpe en la mesa por incumplimiento. Sobre todo, muy importante, asegurar el trato de respeto a la interlocución de la representación sindical; que no implica ceder y conceder casos fuera de normas; porque eso es corrupción, ha sido motivo de conflicto y los conflictos siempre afectan el proceso educativo. Los servidores públicos de todas las áreas del gobierno, en este caso de todos los niveles de la SEG, requieren oficio político para ser eficaces en su encargo; sería, creo, una forma de ponerse a tono con los principios de la 4Transformación.
En el contexto de las 72 horas que duró el movimiento de la Sección 14, el secretario de Educación, Dr. Marcial Rodríguez Saldaña, declaró percibir que “los conservadores” quieren quitarlo de la SEG. Al cuestionarle si era el SNTE, eludió mencionarlo. Por su parte, la CETEG, calificó de “injustificable” el paro convocado por el magisterio institucional. Quedan para el análisis tales reacciones. Lo bueno es que el paro laboral no se prolongó y obtuvo resultados. En hora buena.