UAGro: Jesús Álvarez, lidera el nepotismo

Por: Salomón García Gálvez

Tráfico de poder, nepotismo e influyentismo, han derivado en verdaderos conflictos de intereses dentro de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro). Es un mal que allí se ha enraizado por décadas.

Funcionarios de primer nivel, por muchos años, se han convertido en promotores del nocivo nepotismo que raya en el insulto; pero que ofende hasta a la propia institución universitaria.

Jesús Álvarez Hernández, quien presume ser sobrino del extinto ex rector, Rosalío Wences Reza, es un ejemplo “inédito” dentro de la UAGro: Logró colocar dentro de la plantilla laboral, a decenas de familiares en -nóminas de la institución-.

Una primera investigación sobre el nepotismo en la UAGro, reveló que Álvarez Hernández pudo colocar a su esposa Modesta Hipólito Fierro, con plaza de mando en la Dirección de Servicios Escolares.

A la hija del funcionario aludido, Izeth Álvarez Hipólito, también con plaza de jefa en el Almacén General de la UAGro.

Olivia Álvarez Montalbán, media hermana de Jesús Álvarez, también cuenta con plaza de alta categoría.

José Antonio García Álvarez, sobrino de Jesús, también tiene plaza en la UAGro; al igual que su cuñado, Teodoro García (de un posible primer matrimonio).

Guillermina y Rodrigo Vences -hermanos-, son altos funcionarios de la UAGro, primos de Álvarez Hernández; al igual que la tía de ambos, Laura Sampedro.

Desde principios de la década de los años ochenta, cuando fungió como rector Wences Reza, Jesús Álvarez Hernández, quien se dice sobrino del extinto líder universitario, se empoderó dentro de la UAGro, e incurre en tráfico de poder, influyentismo y nepotismo.

La UAGro ha sido muy generosa con Álvarez Hernández: le ha permitido abatir el desempleo dentro de su propia familia, al cederles plazas con altas categorías, desplazando a profesionistas con perfil y méritos.

A través de su página de Facebook, Álvarez Hernández se ha convertido en “crítico radical” del reciente proceso electoral de la UAGro, sin buenas propuestas para elevar el nivel académico, pero sí con claros tintes de chantaje que en nada positivo abonan a la institución.

En círculos universitarios, trasciende que el verdadero interés del ex secretario general de la UAGro, Álvarez Hernández, es que pretende colocar como próximo funcionario -de primer nivel- a su hijo Jesús Álvarez Hipólito (desempleado), quien recientemente terminó estudios de Fisioterapia.

Recientemente terminó con saldo blanco el proceso electoral dentro de la UAGro, para elegir al nuevo rector y consejeros universitarios del H. Consejo Universitario. La UAGro dio ejemplo de civilidad política electoral, a nivel nacional.

El próximo 6 de junio, Saldaña Almazán recibirá su constancia de mayoría como ganador del proceso electoral en la máxima casa de estudios de la entidad, que lo convierte en Rector Electo de la UAGro.

Ese día, júrelo, habrá festejo en la UAGro, con la tradicional “cargada”, el besamanos, la pasarela, con la presencia de muchos Judas y busca chambas.

Varios “líderes” de sectas y camarillas políticas dentro la institución, ya se frotan las manos, ante la inminente designación de funcionarios del próximo gabinete universitario que encabezará Saldaña Almazán. Van por el reparto del pastel… ¡A ver si pueden!

Jesús Álvarez Hernández, al igual que otros fósiles universitarios, presiona para que les ceda espacios de poder (sin merecerlo) dentro del próximo gabinete que encabezará el Rector (electo) de la UAGro, Javier Saldaña Almazán. ¿Lo permitirá?

Álvarez Hernández -atención- actualmente es el encargado de la Coordinación del Observatorio Institucional de la UAGro, cuya oficina se encuentra dentro de su propio domicilio; despacha desde la comodidad de su casa, pero además le cobra renta a la institución universitaria… ¡Qué tal!… Punto. salomong11@yahoo.com.mx