UAGro: chantajistas, empleados de clínica

Por: Salomón García Gálvez

Una camarilla de médicos y trabajadores de la Clínica Universitaria de la UAGro, a quienes se les exige cumplan su labor y deberes, en respuesta bloquean desde hace una semana la céntrica Avenida Juárez de Chilpancingo, provocando enorme caos y molestia entre la población.

Cuando la Directora de la Clínica Universitaria de la UAGro, Issis Astudillo, convocaba a los empleados a cumplir su labor, un grupúsculo -mal acostumbrado a prebendas y privilegios-, ahora piden su destitución.

Estos, son los cabecillas del “movimiento”, que se dedica a bloquear la Avenida Juárez, en la capital del estado:

-Rafael Anaya Mejía (médico sin Cédula Profesional); Raúl Trujillo Ramírez (doctor que se presenta sólo fines de semana); Jesús Mendoza (lucra con la medicina); Marciana Catalán Julián (farmacéutica, vende productos por catálogo), y Antonio Mendoza, empleado que cobra en Chilpancingo, pero vive en Cuajinicuilapa, donde hace trabajo político para un partido, en busca de un “hueso”.

La realidad, es que el “movimiento” universitario, no tiene nada de académico ni laboral; se trata de un descarado chantaje hacia las autoridades universitarias, por parte de estos cínicos trabajadores de la Clínica Universitaria, quienes imitan a los ayotzinapos y cetegistas, bloqueando arterias y provocando caos vial, de lo cual la población capitalina ya está harta.

Dentro de la Clínica Universitaria de la UAGro., se dan muchas y graves irregularidades. Veamos:

-Rafael Anaya Mejía, se ostenta como Médico, pero carece de Cédula Profesional. Pone en riesgo la salud de los pacientes. Esto, se tipifica como delito previsto en el Código Penal de Guerrero, Artículo 328. ¿Por qué Rectoría de la UAGro, lo permite?

Raúl Trujillo Ramírez, médico pediatra; trabaja los fines de semana. Cobra 600 pesos por cada consulta; se queda con 500 y sólo reporta cien (pesos) a la Administración de la UAGro. Utiliza la Clínica Universitaria, como de su propiedad.

Jesús Mendoza, es médico que lucra con las enfermedades de la gente: envía a los pacientes a su clínica privada (argumentando casos de gravedad), para cobrarles altas tarifas.

Marciana Catalán Julián: Es encargada de la farmacia. Incumple su labor por andar vendiendo productos de catálogo y/o cobrando a sus deudores y morosos.

Antonio Mendoza, empleado; es un caso “curioso”: hace “talacha” para un partido político en su natal Cuajinicuilapa donde siempre radica, pues pretende un cargo -“hueso”-. Es esposo de Zenaida Cuenca Figueroa, Directora de Cultura de la UAGro. Por eso, se siente “muy palanca”.

Existen más nombres -de trabajadores que incurren en graves irregularidades-, y de los que están detrás del absurdo “movimiento”, quienes exigen la destitución de la Directora, Issis Astudillo; su único “error”, es haberles exigido que cumplan sus deberes dentro de la Clínica Universitaria de la UAGro.

Un grupo mayoritario de empleados de la Clínica Universitaria de la UAGro, apoyan a la Directora Issis Astudillo, para que continúe en el cargo.

Se trata de un movimiento político manipulado por una camarilla de médicos y empleados acostumbrados al chantaje y para defender sus prebendas e irregularidades.

Está muy lejos de ser un movimiento laboral y menos académico, lo que ocurre en la Clínica Universitaria de la UAGro; pero la ciudadanía de Chilpancingo, ya está muy fastidiada que esa camarilla de chantajistas bloqueen la céntrica Avenida Juárez.

En cualquier momento, pueden pueden suscitarse hechos de violencia por el absurdo e insultante bloqueo vial a esa importante arteria que atraviesa la ciudad… ¡Cuidado!… Punto. salomong11@yahoo.com.mx