Ciudad de México, Marzo 9.- Es posible e impostergable detener la discriminación y las violencias por razón de género en el país, afirmó la ministra Norma Lucía Piña Hernández, presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), en un mensaje con motivo del Día Internacional de la Mujer.

«Como cada año, hoy también marcho con ustedes, pero en silencio desde otra trinchera, al frente del Poder Judicial Federal, luchando por lo que creemos, que es posible e impostergable detener de una vez por todas la discriminación y las violencias por razón de género».

«Desde donde nos encontremos va por las que estamos, por las que se han ido, por las que vendrán”, expresó la también presidenta del Consejo de la Judicatura Federal.

La titular del Poder Judicial Federal afirmó que se reconoce la deuda histórica en materia de justicia para con las mujeres, por lo que ofreció iniciar acciones para cambiar esa situación.

«En el Poder Judicial Federal reconocemos las deudas históricas del Sistema de Justicia con las mujeres. Las asumimos de frente a los problemas que persisten en la efectividad de la impartición de justicia.»

«Al mismo tiempo, hoy iniciaremos una escucha permanente y progresiva, de forma prioritaria, a mujeres en situaciones diversas de vulnerabilidad acrecentada. Este es mi compromiso. Nuestro compromiso desde el Poder Judicial Federal”, dijo la ministra Piña Hernández.

A través de un videomensaje que se difundió a través de las redes sociales de la SCJN, la presidenta del órgano autónomo indicó que, en relación con las marchas que se realicen con motivo del Día Internacional de la Mujer, al Poder Judicial le corresponde escuchar.

«Hoy, una vez más, nos reunimos para exigir, ni una más. En el Poder Judicial Federal nos toca guardar silencio y escuchar a las mujeres que marchan, que gritan en las calles, que dan voz a las que callan y nos recuerdan a las que hablaron por primera vez.»

«Las únicas voces que hoy se deben oír son las de ellas, las de ustedes. Las escucho”, dijo la ministra presidenta Piña Hernández.

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