DÍA DEL ESTUDIANTE, 2024

Por: Alejandra Salgado Romero

“La educación debe preparar a los jóvenes para contribuir al futuro de forma eficaz”
Organización de las Naciones Unidas

La condición de estudiante es una de las características que definen la juventud, pero además, determinan el tipo de sociedad que tenemos y que tendremos, por lo que el Día del Estudiante cobra una especial importancia. Es verdad que durante las últimas décadas, niños, niñas y jóvenes mexicanos han tenido un creciente acceso a la escuela y permanecen en ella hasta edades más altas, lo que conlleva a un sustancial incremento en la escolaridad de las y los jóvenes actuales en comparación con las generaciones pasadas, así como a enfrentar con relativo éxito algunas de las desigualdades que inciden en nuestro país, logrando, por ejemplo, un acortamiento de la brecha educativa de género que solía existir. Pese a ello, los niveles de asistencia a la escuela y de escolaridad alcanzada por las y los jóvenes aún están lejos de lo que sería deseable y algunas diferencias de género aún persisten.
El Día del Estudiante en México nació tras una huelga en la que el alumnado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) exigió al Presidente en turno su autonomía del gobierno federal, su propósito es honrar a todos los y las estudiantes del país, reconociendo su dedicación y esfuerzo. A pesar de no ser un día libre oficial, muchas instituciones educativas organizan con motivo de esta fecha, múltiples actividades especiales, para celebrar y mostrar su aprecio por sus alumnos y alumnas. El origen del Día del Estudiante en México se remonta a la década de 1920, cuando estudiantes universitarios comenzaron a organizar manifestaciones y protestas para defender sus derechos y exigir mejoras en el sistema educativo. Estas acciones sentaron las bases para el reconocimiento de las y los estudiantes como una fuerza importante en la sociedad mexicana.
Ahora bien, a lo largo de los años, el Día del Estudiante ha evolucionado para convertirse en una celebración que destaca la importancia de la educación y el papel vital que desempeñan las y los estudiantes en el desarrollo del país, sirviendo como un recordatorio de que invertir en la educación es fundamental para construir un futuro próspero y equitativo.
Pero es necesario tener claro que, en su momento, debido a que las autoridades universitarias aumentaron un año a la educación preparatoria, además de cambiar los exámenes profesionales en la Facultad de Derecho, provocando inconformidad entre la comunidad estudiantil, por lo que se declaró la huelga el 9 de mayo de 1929. Cabe mencionar que la organización interna de la UNAM no gozaba de decisiones propias. Según lo estipulaba la ley, el Rector debía ser nombrado por el Presidente de la República y el Ministro de Instrucción Pública era el Jefe de la Universidad. Estos nombramientos gubernamentales, más la crisis de presupuesto que vivía nuestra máxima casa de estudios, perjudicó el funcionamiento interno de la universidad. El personal universitario se redujo grandemente y, de forma paralela, las cuotas estudiantiles crecieron rápidamente, lo que le hizo difícil a muchos jóvenes el poder continuar estudiando.
Narciso Bassols, quien era entonces Director de la Facultad de Derecho, el 20 de febrero de 1929 anunció un cambio del sistema evaluativo que obligaba a los estudiantes a presentarse regularmente a clases, lo que significaba un problema mayor para ellos, pues la mayoría debía trabajar para mantenerse y pagar la propia universidad. Tras varios intentos de acuerdo que no llegaron a nada, el 5 de mayo los estudiantes decidieron tomar la Facultad de Derecho, colgando una representativa bandera rojinegra. Dos días más tarde, el rector universitario, Antonio Castro Leal, decidió clausurar dicha sede para evitar el levantamiento de los jóvenes. El 9 de mayo, los estudiantes en consenso votaron a favor de la huelga, invitando a otras facultades a unirse a ella, con el objetivo de presionar al Rector a sentarse a discutir las demandas exigidas.
El 23 de mayo de dicho año, sin ningún acuerdo firmado, las manifestaciones se tornaron violentas. Las fuerzas policiales intentaron dispersar violentamente a los estudiantes a fuerza de agua y garrotes. La represión fue tal, que causó la indignación de la opinión pública, la cual terminó por apoyar la huelga estudiantil. Esto, a su vez, ayudó a elevar la presión en las decisiones del entonces Presidente interino, Emilio Portes Gil. Ese día fueron agredidos brutalmente por elementos de la policía dentro de las instalaciones de la Escuela de Derecho, lo que desencadenó una serie de protestas y que más planteles se fueran a huelga. El entonces Jefe del Departamento del Distrito Federal, José Manuel Puig Casauranc, se ofreció como intermediario en las negociaciones ante el Presidente Portes Gil y el 25 de mayo, le aconsejó conceder la autonomía universitaria, quien la otorgó el 29 de mayo, y oficialmente el 10 de julio de 1929 se promulgó la ley Orgánica en la que se institucionalizó a la casa de estudios, Universidad Autónoma. A raíz de lo anterior, el 23 de mayo, Día del Estudiante, se toma como un acto simbólico en defensa de la organización estudiantil y de la educación como la principal fuente de desarrollo integral de nuestra sociedad.
Celebremos este día reconociendo el esfuerzo y dedicación de nuestros/as jóvenes en el estudio, así como haciendo todo porque logremos superar la pérdida de interés por el estudio en esta hermosa etapa de vida, en la que desafortunadamente, es frecuente constatar que estudian por obligación, porque todo su entorno (madres, padres, docentes, compañeras/os, etc.) les obliga a ello, y porque es el paso intermedio que necesitan superar para acceder a la vida adulta, sin comprender que el aprendizaje es la única vía para ampliar su visión del mundo y ascender a otro nivel de comprensión y vida, pero también que ser estudiante constituye una etapa de experiencias enriquecedoras y alegrías infinitas que bien vale la pena transitar… y disfrutar.
Les deseo una semana excelente y agradezco sus aportaciones y/u opiniones a través del correo alexaig1701@live.com.mx.