Por: Álvaro Venegas Sánchez

“Vale la pena recordar el pasado” dice un spot de Xóchitl Gálvez. Con él sugiere que antes, todo estaba bien y todos vivíamos mejor. Los millones de ciudadanos que en décadas fueron excluidos y arrojados a la pobreza extrema por el modelo neoliberal depredador (Carlos Salinas de Gortari trató matizarlo llamándolo “liberalismo social”) podrían aclararle y explicarle muy bien a la candidata de Fuerza y corazón por México. “Se acabarán los abrazos a los criminales”, “hay que cambiar todo lo que está mal”, complementa el panista Marko Cortés en otro mensaje. La alianza PAN, PRI y PRD y la minoría que representan, afirman que antes (cuando primero eran los ricos) se podía progresar en cambio ahora nada está bien.

Habría que analizar todos y cada uno de los promocionales que se escuchan y ven a través de la radio y la televisión, los pronunciamientos que hacen y van a seguir haciendo el candidato y las candidatas a la presidencia de México; ubicarlos en la realidad que vivimos y no dejarse confundir. Es necesario hacerlo ante la evidencia de cúmulo de notas falsas, intrigas y chismes para difamar y engatusar. Sobre todo, para que el voto que emitamos el próximo 2 de junio, sea consciente y razonado; para que continúe y se consolide la política implantada en este sexenio o, por el contrario, para que México retome la política que quieren aquellos que estorbaron al presiente López Obrador desde su primer día de gobierno.

Por ejemplo, lo que dijeron Xóchitl y Sheinbaum el primer día de campaña es muy interesante. Esperaban la fecha y prepararon cada quien con su equipo lo que tenían que decir. Y las ofertas fueron claras. Xóchitl Gálvez, en Fresnillo, Zacatecas, anunció como primera propuesta: construir una prisión de muy alta seguridad y con tecnología de punta; con ella cree que los delincuentes “van a sentir temor de caer ahí si cometen atrocidades”. Enseguida, en Aguascalientes, dijo que no trata de imitar a Bukele, presidente de El Salvador; porque allá son pandillas y aquí cárteles peligrosos.

Habló también que con Estados Unidos prefiere tener “una colaboración binacional respetuosa y transparente que seguir permitiendo que los cárteles controlen regiones cada vez más grandes del país”. Asimismo, duplicará la cantidad de los miembros de la Guardia Nacional y retirar de inmediato a los militares de acciones que los distraen, tales como encargos de obras públicas. Por la tarde del mismo día, en Irapuato, se pinchó y selló con sangre el compromiso de no quitar los programas sociales; incluso ofreció otorgar las pensiones para los adultos mayores a partir de los 60 años.

Claudia Sheinbaum por su parte, frente a los seguidores de la Cuarta Transformación que llenaron el Zócalo de la capital del país, leyó los 100 compromisos que constituyen las prioridades de su proyecto nacional para el sexenio 2025-2030. Por supuesto, puso énfasis en lo que políticamente era necesario y la gente quería escuchar. Comparto algunos de sus posicionamientos: “Cuidar el legado de AMLO, el hombre que cambió para bien la historia del país y nos enseñó a no arrodillarnos frente al poder del dinero y a confiar en el pueblo y su dignidad; mi obligación es llevar a México por el sendero de la paz, la seguridad, la democracia, las libertades y la justicia”.

En la misma tesitura continuó: “seguiremos haciendo política con amor y no con odio; con el humanismo mexicano cayeron muchos mitos y engaños del pasado y se demostró que, cuando hay honestidad alcanza para proporcionar recursos al pueblo; gobernaré sin someterme a ningún poder económico, político o extranjero y con Estados Unidos sería de buena voluntad para coordinación, pero sin agachar la cabeza; habrá libertad de expresión, de prensa y de movilización y enviaría una iniciativa para revertir la relección consecutiva de legisladores y alcaldes; el 2 de junio habrá dos caminos a tomar: uno, para que siga la transformación; el otro, para que regrese la corrupción”.

Del partido MC, la prensa destacó la falta de acompañamiento a su candidato Jorge Álvarez Máynez en el primer día de campaña en Lagos de Moreno, Jalisco. La entidad la gobierna su compañero de partido Enrique Alfaro. A pesar de ello, aseguró que en 90 días dará vuelta a las encuestas y ganará la Presidencia.

Pues ahí están los tres Claudia, Xóchitl y Máynez. Recorren estados y municipios, explican sus ofertas y tratan convencer con ellas a los que contactan y escuchan. Lo demás, es decir el voto, dependerá de la confianza que logren inspirar a los ciudadanos. Los mexicanos difícilmente serían adormecidos otra vez por “los expertos” y las mentiras que propalan medios de comunicación.

Comparte en: