Por: Álvaro Venegas Sánchez
Bertha Xóchitl Gálvez, ingeniera, política y ocupación en el ramo empresarial. Aunque ahora milita en el PAN, hace poco dijo que también profesó el trotskismo. Nació en Tepatepec, Hidalgo, el 22 de febrero de 1963. Claudia Sheinbaum Pardo (24 de junio de 1962) política, científica, académica. Proviene de padres nacidos y radicados en México, pero de raíces judías. Identificada con la lucha universitaria en la UNAM y con la lucha social al lado de López Obrador desde cuando éste fue Jefe de Gobierno y luego para construir el Movimiento de Regeneración Nacional.
El nombramiento que recibieron, como haya sido, es lo de menos; ya están a la vista de todos en el escaparate político y la gente las observa y escucha. Mira cómo reaccionan y responden a ciertas preguntas. El temple, la originalidad, las muecas, conocimiento, titubeos, no pasan desapercibidos. Los simpatizantes obviamente hablan bien y destacan lo positivo de una y magnifican los negativos de la otra. Empero, al margen de los cercanos e interesados en posesionarlas están los electores comunes y corrientes; esos a quienes ellas tienen que inspirar confianza y conquistar para su causa.
Sería prematuro e incorrecto afirmar que la ciudadanía en general las conoce, sabe cómo piensan y para qué quieren la presidencia de México. Si bien han sido seleccionadas por tres partidos políticos, la totalidad de la militancia del PAN, PRI, PRD, Morena, PT, PVEM incluso anexando la de MC, apenas es una mínima parte de los millones de personas que votarán en las elecciones del próximo año. Por ahora son bastante conocidas solamente por los protagonistas de los noticieros y los miembros de los partidos mencionados. El pueblo, la mayoría de ciudadanos, las verá y escuchará qué proponen hasta cuando tengan la oportunidad de que los visiten durante la campaña.
Ciertamente hechos y dichos de las primeras horas y días dan luz de lo que podrían ser discursos y posiciones más razonadas; las que proyectarían de verdad tanto su visión y estilo personal como el propósito de las fuerzas que representan. En ese sentido, desde el principio deben y tienen que ser muy cuidadosas de lo que declaran y hacen, porque todo trasciende, para evitarse cuestionamientos e incomodidades aclaratorias ante enredos provocados por ellas mismas. Convencieron y lograron el apoyo de los suyos; pero falta lo más importante: convencer y lograr el apoyo social mayoritario.
Van dos ejemplos. Uno mientras a los propios emociona a los demás causa alarma. La representante del Frente por México, ha adelantado que, en caso de ser elegida como presidenta en el 2024, está dispuesta a ofertar el sector energético, PEMEX y la CFE, al sector privado, porque las empresas estatales son “pésimas para administrar el dinero y que las rondas petroleras van a volver porque PEMEX no tiene recursos para explorar”. Esto más o menos es presumir mejores sogas en casa del ahorcado. Apenas estamos superando las dificultades y quieren empujarnos de nuevo al pozo. Otro ejemplo de desplante de Xóchitl frente a Jesús Zambrano, Marko Cortes y Alejandro Moreno suscitó suspicacia y curiosidad: “No quiero huevones, rateros ni pendejos”.
Claudia Sheinbaum proyecta que piensa para hablar. Así sea ante sus compañeros, el presidente de la República, la prensa o de cara al público siempre lo hace con mesura y a la vez con firmeza más que con emoción. De entrada, expresó: estaré a la altura de las circunstancias y jamás traicionará el anhelo de seguir construyendo un México aún más justo, fraterno, soberano, libre y democrático.
Frente a López Obrador dijo algo que Xóchitl Gálvez, mal se habría visto decírselo a Claudio X González o al presidente su partido, Marko Cortés. Con naturalidad y claro reconocimiento, AMLO escuchó de Claudia Sheinbaum: “Usted, querido Presidente, es un referente ético y moral, que nos ha enseñado a no caernos frente a ninguna adversidad, a no arrodillarnos frente al poder del dinero, a confiar en el pueblo y su dignidad y a que, cuando hay revolución de las conciencias y un pueblo se empodera y reconoce su fuerza y su historia ¡no hay nada que lo detenga!
Pues ahí están, a la vista de todos. Pasada la prueba de las urnas Xóchitl o Claudia será la presidenta de México. Para el día de las elecciones los mexicanos sabrán, estarán bien enterados del proyecto que representan, el que desde hoy les han encargado las fuerzas políticas y personajes que las respaldan. El pueblo es sabio, no va a equivocarse.
Iguala, Gro., septiembre 11 del 2023.