IRZA
Acapulco, Gro. El presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado, Ricardo Salinas Sandoval, aseguró que no tenía conocimiento de amenazas en contra del magistrado Edmundo Román Pinzón, asesinado a balazos la tarde del miércoles al salir del Palacio de Justicia ubicado en la zona de Caleta, en el fraccionamiento Las Playas.
Y menos, añadió, que hubiera otros motivos para privarlo de la vida por el desempeño de su labor en el Juzgado, donde dijo sólo atendía asuntos penales.
“Fue un crimen artero y estamos pidiendo en forma respetuosa a la Fiscalía (General del Estado) que se informe del asunto y se esclarezca a la brevedad posible. Es un reclamo del Poder Judicial del Estado”, declaró afuera de la Funeraria San Pedro, en la avenida Cuauhtémoc, en donde eran velados los restos del magistrado asesinado Edmundo Román.
-¿Va a reforzar la seguridad personal?, se le cuestionó.
-“No, no, voy a continuar con la misma. No la voy a reforzar. Estamos trabajando normalmente, ya hay vigilancia en el Palacio de Justicia, en Caleta. Es natural que uno sienta temor”, respondió.
“Comparto la opinión de la señora gobernadora (Evelyn Salgado Pineda), de que se haga justicia y se detenga al presunto responsable”, señaló el presidente del TSJ.
Cabe señalar que al funeral llegó la magistrada y ex alcaldesa de Acapulco, Adela Román Ocampo, quien alertó que tras el crimen cometido contra el ex presidente del TSJ, Edmundo Román, jueces y magistrados se encuentran en vulnerabilidad.
Añadió que “en los plenos que hemos estado y que estuvimos juntos, (Edmundo Román), nunca habló de ningunas amenazas. Yo creo que si hubiese pasado o hubiese tenido alguna amenaza lo hubiera hecho del conocimiento”.
Este jueves, en Caleta, efectivos de la Semar, Guardia Nacional, Policía Estatal y municipal, resguardaban la sede del Poder Judicial del Estado. Además, en el acceso al Palacio de Justicia se colocó un moño negro en señal de luto por el crimen del jurista.