IRZA
Chilpancingo, Gro., En el asesinato del alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, no están involucrados otros militares, más que Germán Reyes Reyes, quien está sujeto a proceso penal, dijo este miércoles la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, y anunció que el próximo martes el Gabinete de Seguridad dará más información sobre el caso.


En su conferencia en Palacio Nacional, le preguntaron sobre la ejecución de Alejandro Arcos Catalán, en octubre del año pasado en esta capital. Lo encontraron decapitado al oriente de la ciudad.


Le recordaron que en el primer año de su sexenio han sido asesinados 10 alcaldes, tres de ellos de Guerrero, y de la petición expresa del alcalde sustituto de Chilpancingo, Gustavo Alarcón Herrera, de que le brinden apoyo, y dijo que “en todos los casos se brinda apoyo a los presidentes y presidentas municipales ahora con lo que vivimos en Uruapan con el alcalde Carlos Manzo se va a revisar, en particular Michoacán, qué otras protecciones y qué mecanismos de seguridad adicionales necesitan todos aquellos que han solicitado seguridad, igual que en toda la República”.


La presidenta indicó que pedirá “que lo pudieran explicar el martes el Gabinete de Seguridad”, y añadió que por este hecho está preso y sujeto a proceso quien era encargado de Seguridad Pública de Chilpancingo, el militar Germán Reyes Reyes, pero que “no hay otros militares involucrados”.


Informó que la familia de Arcos Catalán decidió no recibir ningún apoyo de la Federación, como víctimas. “En su momento hubo acercamiento a la familia y no solicitó apoyo ni económico; en general a todas las víctimas, no solo en caso de presidentes y servidores públicos que hayan vivido una situación o un homicidio de uno de sus miembros, sino en general hay una Ley de Víctimas y hay todo un proceso que tiene que ser determinada como víctima en donde se sigue un proceso y se le brinda apoyo, sea por un homicidio o también por casos de accidentes o de alguna otra situación en donde haya fallecido algún otro familiar”, refirió.


Sobre si esos asesinatos de alcaldes y los crímenes que se han cometido contra candidatos a puestos de elección popular no es una guerra declarada del crimen organizado al sistema político en México, respondió: “cada caso es diferente, es distinto, no puede decirse que hay una decisión de algún grupo de la delincuencia organizada para atacar a servidores públicos, cada caso es distinto, en algunos casos lamentablemente no tiene que ver por un tema por ser autoridad, sino porque había alguna implicación dentro de la delincuencia organizada”.


Y agregó que por ello “cada investigación debe decir cuál es el móvil, la detención, la justicia, todos en este país tenemos derecho a la justicia, debemos trabajar para que haya cero impunidad, y lo plantee desde el primer día de mi gobierno, pero cada caso es diferente, no consideramos que haya una situación así”.