Copala, Gro., junio 18 de 2024 (IRZA).- Este martes, bajo fuertes medidas de seguridad, se realizó en Copala el funeral del alcalde electo del Partido México Avanza, Salvador Villalva Flores, asesinado la madrugada del lunes en la carretera federal Acapulco-Pinotepa Nacional, a la altura del poblado Tres Palos.

Fue velado en su domicilio particular, en la calle Matamoros de la colonia Barrio Nuevo, muy cerca del Palacio Municipal, en esta región de Costa Chica.

De ahí partió, el cortejo fúnebre. El ataúd fue cargado en hombros por familiares e iban escoltados por elementos de la Guardia Nacional.

Caminaron entre llantos, gritos de exigencia de justicia y música, y más adelante se incorporó, ataviada con un ajustado vestido de negro, la alcaldesa con licencia y diputada local electa, su prima Guadalupe García Villalba, quien también llevaba seguridad.

Cabe señalar que algunas personas a gritos le demandaron que se fuera, pues han llegado a señalarla como presunta responsable del crimen, pero Guadalupe García Villalba, quien ha rechazado tajantemente esos señalamientos, se mantuvo firme en el cortejo fúnebre de su primo Salvador Villalva Flores.

También se incorporó Rogelio Solano Pérez, el alcalde suplente de Copala, flanqueado por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública estatal y de la Guardia Nacional.

Rogelio Solano Pérez, brevemente, anunció que asumirá el cargo de presidente municipal en sustitución del malogrado Salvador Villalva Flores.

Cabe señalar que, aunque en un principio los familiares de Salvador Villalva pidieron que no hicieran un “circo” del funeral, finalmente permitieron realizar algunas imágenes.

El capitán retirado de la Marina Armada de México, Salvador Villalba Flores, contendió encabezando la plantilla del Partido México Avanza y ganó los comicios del pasado 2 de junio en este municipio de la Costa Chica.

Llevaron el ataúd a la iglesia, y ahí algunos de sus familiares le rociaron agua bendita. Después caminaron hasta el Zócalo, donde a unos metros se encuentra el Palacio Municipal, el cual estaba flanqueado por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública local y con ellos la alcaldesa Guadalupe García Villalba.

Posteriormente, el cortejo fúnebre partió resguardado por elementos de la Guardia Nacional y de la policía del Estado, hasta llegar al panteón municipal.