Fernando Polanco Ochoa
Chilpancingo, Gro., El diputado Pánfilo Sánchez Almazán, presidente de la Comisión de Educación, Ciencia y Tecnología del Congreso local, confirmó que existen cooperativas de escuelas públicas que se resisten a evitar la venta de comida chatarra.
Aunque aclaró que no podía “generalizar”, dijo que recientemente, junto con autoridades educativas, visitó un Centro de Bachillerato Tecnológico Agropecuario de Acapulco donde observó esa conducta.
“Resulta que vimos la Cooperativa y había productos chatarra. Incluso, recuerdo que el titular de los CBTA´s a nivel nacional les dijo a los responsables: ‘¿oye qué está pasando acá?’. Entonces yo creo que sí debemos de ser responsables”, dijo.
Desde la autocrítica, comentó el legislador del Partido del Trabajo, “también nuestra gente se resiste a los cambios, a la disciplina, porque es un tema de disciplina, pero yo digo que vale la pena que lo hagamos por nuestras niñas y niños y adolescentes”.
Aclaró que el interés superior debe ser siempre la salud y el futuro de los niños y adolescentes. “Vemos cómo niños de nivel básico ya padecen de problemas de obesidad, en ese sentido creo que tenemos que estar a la vanguardia con nuestra legislación”.
El Programa de Entornos Escolares Saludables fue impulsado por el gobierno de la República, a través de una reforma a la Ley General de Educación, publicada el 29 de marzo del 2023 en el Diario Oficial de la Federación.
Entre otras medidas, prevé la obligación de promover entornos escolares libres de comida chatarra y bebidas azucaradas, así como fomentar el consumo de alimentos nutritivos y la educación alimentaria en los planteles de nivel básico.
Sin embargo, el Congreso de Guerrero no ha homologado o armonizado la legislación local con la federal. Apenas la semana pasada el diputado Pánfilo Sánchez presentó una propuesta de reforma a la Ley estatal de Educación en ese sentido.
Con esa esa iniciativa, explicó, pretende que la legislación de Guerrero en materia educativa establezca también la prohibición de comida chatarra en las escuelas públicas de la entidad y privilegia el consumo de productos nutritivos de la región.
El diputado demandó a las autoridades educativas, comités de padres de familia y comités de participación ciudadana que ayuden a hacer “efectivas estas leyes”, porque de lo contrario no tendría ningún resultado favorable.
Sánchez Almazán no descartó sanciones para los responsables de cooperativas o directivos de escuelas públicas que se nieguen a prohibir la venta de comida chatarra, aunque aclaró que “en su momento” las habrán de valorar.