Por: Natividad Ambrocio Cuevas

Iguala, Guerrero, Agosto 23.- El sacerdote Felipe Vélez Jiménez reanudó actividades religiosas como responsable de la parroquia de San Gerardo María Mayela, luego de que estuviera delicado de salud por las heridas de arma de fuego que recibió por un grupo de sujetos desconocidos cuando salía del municipio de Chilapa, el pasado 28 de julio.

Este lunes, el obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández, celebró una misa por la salud y la incorporación después de 22 días en estado delicado de salud del padre Felipe Velez a sus responsabilidades al frente de la parroquia de San Gerardo María Mayela y como presidente del Decanato del municipio de Iguala.

Al concluir la misa, feligreses ofrecieron una convivencia en honor del presbítero Felipe Vélez Jiménez como del obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, quienes compartieron el pan y la sal.

En entrevista, el sacerdote Felipe Vélez dijo que la semana pasada ya rindió su declaración ante las instancias correspondientes y desconoce lo que ocurrió el 28 de julio cuando fue atacado a balazos por sujetos desconocidos.

“Yo me he enfocado en mi recuperación y en mi salud integral en todos los aspectos, física, emocional y espiritual”, expresó.

En cuanto a las investigaciones de las autoridades sobre su caso, respondió que esperará a que hagan su trabajo y que ellos informarán los resultados.

El religioso manifestó su agradecimiento a toda la comunidad como a la Diócesis, sus compañeros y el obispo, de quien recibió apoyo moral, espiritual y económica.

Detalló que durante los 22 días que estuvo internado, no tuvo noción de varias cosas y que cuando recobró el conocimiento, él estaba recibiendo atención médica en el estado de Morelos.

Indicó que aún no está al 100 por ciento recuperado, por lo que todavía no podrá celebrar misas, pero que al regresar, ya retomó su responsabilidad al frente de la parroquia de San Gerardo, así como presidente del Decanato de Iguala.

“Yo me estoy enfocando en mi recuperación que será poco a poco y no podré salir a otros lados, quiero agradecer a todos por su apoyo que me brindaron”, reiteró.

Finalmente opinó que es una buena medida que como sacerdotes y religiosos, coloquen logos de la Iglesia a sus vehículos para que puedan desplazarse y evitar situaciones que los pongan en riesgo.