-A resguardo el escudo de Iguala

Por: Rafael Domínguez Rueda

Dado que se desconoce el paradero del original del escudo de armas del municipio de Iguala de la Independencia, y en virtud de que, a través de los años se ha venido deformando la imagen original, a tal grado que alguien comentó que el hombre-jaguar ya parecía la pantera rosa, originó que miembros de la Asociación de Historiadores y Cronistas de Iguala, A.C., quienes trabajan “por el rescate y difusión de nuestra historia”, entrevistaran al Arq. José Luis Díaz Milanesio, autor del escudo, para que lo rediseñara –mejorar la imagen original-.

El propósito era hacerlo llegar a la primera autoridad para que, de considerarlo relevante, el Arq. David Gama Pérez, lo ponga a consideración del Cabildo y de aprobarse, se difunda, quede bajo resguardo y exposición.

La maestra Carmen Perea, Directora de Cultura, fue el enlace para la realización del acto de entrega-recepción. Ella, con su eficiente equipo de trabajadores, logró que el evento protocolario resultara solemne, brillante y representativo. No voy a reseñar el acto. Los comunicadores lo hicieron oportunamente. Más bien, voy a describir, como lo hiciera el autor Arq. José Luis Díaz Milanesio, ese hermoso escudo de armas de Iguala que ahora se puede apreciar hasta en tercera dimensión.

El campo principal del escudo tiene forma de U, con fondo gris. En la parte superior, aparece la figura de un guerrero-jaguar en posición de combate, sosteniendo con su mano derecha una macana y con su mano izquierda un escudo de guerra o rodela. La rodela tiene forma circular en colores negro y blanco y está decorada con tres figuras llamadas grecas, de colores rojo, blanco y verde. Resalta la parte inferior de la rodela un fondo en oro que representa el metal que usaban como adorno los grandes señores.

En el lado izquierdo figura nuestro actual Lábaro Patrio, unido mediante la sangre que corrió durante la Guerra de Independencia, a la Bandera de las Tres Garantías que nació precisamente en Iguala y que se encuentra en el lado derecho.

Al centro, el símbolo más antiguo de la Ciudad, que en esta presentación luce de una forma destacada: el Glifo de Iguala. Éste, a su vez, enmarca otro de los íconos arquitectónicos más relevantes de Iguala, como lo es el Monumento a la Bandera.

Las siete montañas que forman el Valle: el cerro de Tuxpan, el de Platanillo, la Silleta, Mexcaltepec, Cerro Grande, los Anteojos y el Tepehue (Tehuehue), también enlazan a la Bandera actual con la Trigarante.

En la parte inferior central conectando la cadena de montañas, se alza un tamarindo, árbol característico de Iguala.

Aparecen, en la parte inferior, al centro, un rifle y una espada; representan las fuerzas armadas de insurgentes y realistas que integraron el Ejército Trigarante.

Sobrepuestas, una cruz grande y cuatro pequeñas, emblema de los frailes menores franciscanos, misioneros que evangelizaron la región.

SIGNIFICADO DE LOS ELEMENTOS QUE CONFORMAN EL ESCUDO DE ARMAS DE IGUALA: El Caballero-Jaguar, en la cosmovisión prehispánica es el símbolo de la noche y del poder nocturno; el jaguar como ser divino es identificado con una de las deidades más poderosas: Tezcatlipoca, Señor de la Noche y quien lleva en su atuendo el Glifo de Iguala. El fondo gris representa la noche, significado precisamente de la palabra Iguala: “en la noche” o “lugar de la noche”. El escudo de guerra o rodela, es un símbolo náhuatl que significa “capa del Señor con poder”. En el escudo, además, aparecen ocho imágenes más que nos dan identidad: el Glifo, nuestro origen prehispánico; la Bandera, nuestro mayor timbre de orgullo; el Monumento a Iguala, a los Héroes y a la Bandera; las siete montañas que forman el Valle; las armas, que atestiguan el nacimiento del Ejército Trigarante; las cinco cruces nos recuerdan el período colonial; el árbol, por el que éramos conocidos como la “Ciudad de los Tamarindos” y el campo amarillo de la rodela nos dice que aún somos la “Ciudad del Oro”.

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