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Estados Unidos. Donald Trump arrasó en las primarias republicanas de varios estados, dejando a un lado a su rival Nikki Haley y afianzando una revancha con el presidente Joe Biden.
Los votantes en 15 estados y un territorio de Estados Unidos escogieron a sus candidatos presidenciales en el Supermartes. Hasta el cierre de esta edición, Trump ganaba en ocho estados: Virginia, Carolina del Norte, Oklahoma, Tennessee, Maine, Alabama, Arkansas y Texas, según proyecciones de los medios de EU.
La inmigración y la economía son las principales preocupaciones de los votantes de ambos partidos, según los sondeos a pie de urna en California, Carolina del Norte y Virginia.
La mayoría de los votantes republicanos en esos estados dijeron estar a favor de deportar a los inmigrantes ilegales.
Trump, que con frecuencia denigra a los inmigrantes, ha prometido organizar el mayor esfuerzo de deportación de la historia de Estados Unidos si es elegido.
“La frontera es una completa catástrofe”, dijo Katherine Meredith, una ama de casa de 65 años, votó por Trump en la localidad californiana de Huntington Beach, Se esperaba que Biden, no tiene adversario dentro de las filas demócratas porque es el presidente en ejercicio, saliera airoso de las contiendas demócratas, aunque activistas que se oponen a su fuerte apoyo a Israel pidieron a los estadounidenses musulmanes y progresistas que emitieran votos de protesta “no comprometidos” en Minessota, como hicieron antes en Michigan.
El presidente ganó fácilmente ayer en Texas, Arkansas, Carolina del Norte, Virginia, Oklahoma, Tennessee y Iowa.
Trump, que ha dominado la campaña republicana a pesar de múltiples cargos criminales en su contra, ha ganado todas las primarias menos una hasta el momento, reduciendo a dos el abultado campo de candidatos republicanos.
Aunque Trump no puede ganar suficientes delegados para hacerse formalmente con la nominación el martes, otra actuación dominante presionó aún más a Haley, exembajadora ante la ONU bajo el mandato de Trump y exgobernadora de Carolina del Sur, para que abandone su candidatura. Virginia había sido uno de los estados que los asesores de Haley habían señalado como una oportunidad para una sorpresa debido a la mayor proporción de votantes ricos y con estudios universitarios que tienden a apoyarla frente a Trump.
En Vermont el margen era muy estrecho y Haley todavía podría ganar.
Las votaciones del día otorgarán más de un tercio de los delegados republicanos, y más de 70 por ciento del número necesario para asegurar la nominación.
Así, su hipotética nominación matemática puede que suceda el próximo día 12, donde se repartirán 161 delegados en primarias de estados como Georgia (59) o Washington (43). Pero con certeza lo logrará -salvo sorpresa mayúscula- el próximo día 19, donde se adjudicarán 414 delegados en las primarias de estados como Florida (125) y Ohio (79).