Por: Álvaro Venegas

Enterado de la presentación del libro titulado CON PALABRAS SUAVES, evento realizado en junio en la ciudad de Iguala, el maestro Silvano Palacios Salgado, secretario general de la sección 14 del SNTE, propuso a un servidor compartir la experiencia al pleno del comité ejecutivo seccional. Por supuesto acepté. Debido a situaciones de orden social que impactaron la capital del estado, la actividad fue reprogramarla en dos ocasiones. Finalmente, el viernes 1 de marzo, pudo efectuarse en el auditorio del edificio sindical.

Del contenido ya he hablado; repetirlo sería ocioso para los que leen mis escritos. Sin embargo, comentaré dos puntos. Primero. Me sorprendió que la presentación del texto de mi autoría sirviera para conocerlo; para tal fin, la Licenciada Laura Olivia Mendoza Figueroa, maestra del Centro de Estudios de Bachillerato José Vasconcelos y el Doctor Marcel Calixto Cuevas, estuvieron excelentes en los comentarios. Mi gratitud a ellos porque se involucraron en la lectura. Lo que no esperaba es que el acto fuera también para hacerme objeto de un reconocimiento en términos expresados por el Secretario General a nombre de la directiva seccional.

Al escucharlo, vino a mi mente la figura, el recuerdo al maestro Othón Salazar Ramírez a quien tuve el privilegio de conocer y tratar. En su momento, el Congreso del estado de Guerrero, lo hizo merecedor de la Presea Sentimientos de la Nación. El detalle fue que, diputados de su partido, el PRD, negaron el respaldo a la propuesta; le fue otorgada gracias a que la mayoría parlamentaria priista, votó a favor. En el capítulo Actores políticos, libro en comento, abordé el caso con el título: REGATEO INJUSTO A OTHÓN SALAZAR.

Guardando toda proporción, pues sí participé en la lucha magisterial incluso antes del CCL-CNTE, de la CETEG, y siempre he estado al lado de las causas justas por convicción democrática; sin afiliarme, siempre también he apoyado a los partidos de izquierda y los candidatos que han postulado, desde Valentín Campa Salazar hasta López Obrador. ¡Caray! que mi modesta trayectoria y contribución la reconozcan “los maestros institucionales”, me hizo pensar en desaciertos e injusticias cometidas entre compañeros por pasiones políticas, intrigas o simples humores y mediocridades. Al paso del tiempo, hay ejemplos, los que parecían honestos y congruentes, se revelaron peores. Agradecí allá al momento y lo comparto “a mis cuatro lectores”; quizás sirva de algo.

El otro punto tuvo que ver con preguntas que me hicieron maestras y maestros en presentaciones anteriores: Cuál es mi percepción actual del sindicato y qué retos considero tiene el SNTE. Leí unas líneas del escrito que al finalizar el acto entregué al Secretario General y al representante del comité ejecutivo nacional. Por cuestión de espacio, transcribo síntesis solamente de algunas:

“Con la nueva realidad el SNTE tiene que profundizar su democracia interna para cohesionar, sumar y fortalecer la unidad sindical en los estados y a nivel nacional. La división, la proliferación de sindicatos o expresiones sindicales, con o sin reconocimiento oficial no es garantía de fortaleza”; “Las modificaciones de los artículos 3, 31, y 73 de la Constitución en mayo del 2019, anuló en los hechos la bilateralidad frente a la SEP, la representatividad ante los propios agremiados y por tanto eliminó la esencia del sindicato”. “La Ley General del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros, que da sustento legal a la USICAMM representa una camisa de fuerza y otorga facultades exclusivas a las autoridades en materia de cambios de adscripción, compactación de horas, cubrir vacantes, promociones, etcétera, etcétera: Recuperar la esencia es el reto fundamental”.

Ante ello debe trabajarse en dos sentidos: “abrir el análisis desde la base para integrar a todos en la misma visión y objetivo; cultivar relaciones con otras organizaciones gremiales que tengan propósitos similares; no descuidar la gestión de la problemática laboral para recuperar la figura de la representatividad sindical como se pueda y con lo que se pueda; planear y organizar planteando metas a corto, mediano y largo plazo evitando la improvisación, protestas reactivas y no sólo apostar a la esperanza de que con administración que sigue podría irle mejor al sindicato”. Ojalá también estas reflexiones sirvan de algo.

Por la atención, el respeto y por la inesperada distinción que recibí de la representación de la Sección 14. Muchas gracias.

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