Quadratín
Acapulco, Gro. Obispos pidieron a las autoridades garantizar la seguridad, luego de los hechos violentos que se han registrado en la entidad.
Un mensaje señala que es desgarrador ver a tantas personas que lloran a sus esposos, padres, hijos, nietos, hermanos, amigos, sus bienes robados y sus pueblos abandonados.
Añadió que Guerrero ha soñado con la paz día con día, sin embargo, las luchas de poder en torno a intereses parciales se hacen cada vez más fuertes porque cuentan con la complicidad, tolerancia o indiferencia de quienes deberían promover y asegurar la justicia, la legalidad y la seguridad.
“Culpar a otros de esta situación no resuelve este vergonzoso drama. Pareciera que vivimos en una sociedad sin corazón”, lamenta.
Denunció los nuevos atentados contra la dignidad, los derechos y la vida de tantas personas de los pueblos y ciudades e invitó a la sociedad a sumar fuerzas para construir una sociedad más justa y fraterna donde reine la paz.
“Cerremos filas y sumemos esfuerzos con grupos e instituciones, dentro y fuera de la Iglesia, para consolar a los familiares de las víctimas, exigir a las autoridades la protección de la integridad física de las fuentes de trabajo y promover la justicia y la fraternidad”, indica el texto.
“Pedimos a las autoridades civiles y militares que ejerzan su autoridad y garanticen la seguridad, el libre tránsito y el trabajo exento de cuotas y extorsiones, para que las familias puedan vivir dignamente.”, añade.
El mensaje de los Obispos de la Provincia Eclesiástica de Acapulco, está firmada por el arzobispo de Acapulco, Leopoldo González González; el obispo de Chilpancingo-Chilapa, José González Hernández; el obispo de Ciudad Altamirano, Joel Ocampo Gorostieta y el obispo de Tlapa, Dagoberto Sosa Arriaga.