Consejos para el regreso a la escuela -¡Felicidades mami!-Don Chimino

Por: J. David Flores Botello

CONSEJOS PARA EL REGRESO A LA ESCUELA.- La vuelta a la escuela es un momento crucial tanto para los niños como para los padres. Después de un período de descanso, es normal que los pequeños sientan una mezcla de emociones: excitación, ansiedad e incluso un poco de incertidumbre. Prepararlos adecuadamente puede facilitar su transición y ayudarles a comenzar el año escolar con el pie derecho. Aquí te comparto algunos consejos útiles: A).- Establezca una rutina previa. Una de las mejores maneras de preparar a los niños para el regreso a clases es restablecer una rutina que se asemeje a la del año escolar. Esto incluye horarios para dormir, levantarse y comer. Lo ideal es hacerlo al menos una semana antes del inicio de clases, para que se adapten gradualmente al nuevo horario. B).- Platique cosas positivas sobre el regreso a clases. Hable con tus hijos sobre lo que pueden esperar en el colegio. Pregúnteles sobre sus compañeros, qué materias les interesan y si hay algo que les preocupa. Asegúrese de enfatizar los aspectos positivos, como reencontrarse con amigos y aprender cosas nuevas. C).- Preparación del material escolar. Involucre a sus hijos en la compra de útiles escolares. Permítales elegir sus mochilas, lápices y cuadernos. Esto no solo los entusiasma, sino que también les da un sentido de autonomía y responsabilidad hacia su educación. D).- Visitar la escuela. Si es posible, realice una visita a la escuela antes del inicio de clases. Pasée por el sitio donde está ubicada, vea las aulas. Conocer a los maestros puede ayudar a reducir la ansiedad y hacer que los niños se sientan más cómodos en su entorno. E).- Fomentar la independencia. Anime a sus hijos a ser más responsables en su día a día. Esto puede incluir pedirles que organicen sus mochilas, preparen su ropa para el día siguiente o se involucren en la planificación de su desayuno. La independencia ayudará a fortalecer su confianza cuando regresen a la escuela. F).- Manejo de las emociones. Es normal que los niños sientan un poco de ansiedad al comienzo del año escolar. Enséñeles técnicas simples para manejar esta ansiedad, como respirar profundamente o hablar sobre sus preocupaciones. Validar sus sentimientos puede ayudarles a enfrentar sus miedos de manera más efectiva. G.- Establecer expectativas académicas. Hable con sus hijos sobre la importancia de esforzarse en la escuela, pero también establezca expectativas realistas. Asegúrese de que comprendan que está bien cometer errores y aprender de ellos. Esto puede ayudar a reducir la presión que sienten y fomentar una actitud positiva hacia el aprendizaje. H).- Mantener la comunicación abierta. Es importante que los padres mantengan una comunicación abierta con sus hijos. Pregunte sobre su día, escuche lo que tienen que decir y apóyelos en cualquier conflicto o desafío que enfrenten. Saber que tienen un gran apoyo en casa les brindará la confianza necesaria en el entorno escolar. I).- Considerando que la 2ª Jornada Nacional de Lucha contra el Dengue lleva como lema: “Por las niñas y los niños, ¡primero las escuelas!” ante el inminente regreso a la escuela, es crucial que los niños estén preparados para cuidarse de los mosquitos. Eduquemos a los niños sobre el uso de repelentes y vístalos con ropa adecuada para evitar picaduras, lo ideal es que vistan pantalones y camisas que cubran brazos y piernas. Inculquéles la importancia de mantener el área escolar limpia, eliminando recipientes con agua y podando hierbas para evitar criaderos de mosquitos. Fomenten actividades conjuntas de limpieza entre padres, docentes y estudiantes para crear un entorno saludable. Realicen charlas sobre riesgos de los zancudos para informar a los alumnos. Al promover estos hábitos, ayudamos a nuestros niños a estar mejor preparados y más conscientes de su salud y del entorno escolar.
¡FELICIDADES MAMI!.- Hoy iniciaremos los festejos por sus 91 años que cumplirá mi mami el próximo lunes 26 de agosto. ¡Muchas felicidades mamita querida! Eres una bendición en nuestras vidas. Dios te siga bendiciendo con esa energía, optimismo y deseos de vivir y disfrutar de tu enorme familia y de tanta gente que te quiere y te respeta por el gran ser humano que eres. ¡Felicidades! ¡Te amo!
DON CHIMINO.- ¿Recuerdan que, apenas no tarda, les patiqué que se me ponchó una llanta cuando regresaba de Tóxpan? Esa vez corté la pática porque el Daví cada vez escribe más y me deja cada vez menos espacio. Ni modos, dijo aquél. Esa tarde, agún todavía se miraba bien la carretera. Agu no me explico cómo chingados pero centré la llanta delantera derecha de mi Forcito, mero en el bache-hoyo más grande y hondo de todo el camino. ¡Y vaya que hay un chingo! Ese día mi compa Vitorio nos invitó a mí, a mi compa Chón y a mi compa Flor a tomarnos unas cheves. Cada dos meses nos reunimos en la casa de cada uno cada vez. Quedamos de vernos en un restaurán a la orilla de la laguna a las 2 de la tarde. Como mi compa Vitorio vive en Tóxpan conoce y lo conocen todas las gentes, por eso los meseros nos atendieron muy bien, estuvieron limpie y limpie la mesa con un trapo empapado de cloro porque, había un chinguísimo de moscas. Nos sirvieron un caldito de mojarra con la primera cerveza, unas pescadillas con la segunda cerveza, un ceviche de pescado a las tercer cheve, un coctel de camarones a la cuarta y a la quinta, un caldo de cuatete. Taba tan buena la paticada que ni cuenta nos dimos del paso del tiempo. Tábamos terminando nuestro six cad´uno y disfrutando el aguachile que nos llevaron, cuando le llamó mi comadre Salomé a mi Compa Vitorio, que a ver a qué hora, que ´bían quedado que nomás hasta las 6 de la tarde. Algo le quiso contestar mi compa pero, más juerte se oyó su voz de ella hasta que él le dijo, “está bien, ahorita voy”. Arajo con mi compa, ya ni chinga. Apenas iba yo a pedir la siguiente tanda de cheves y el muy mandilón pidió la cuenta. Y no crea que por pedo iba yo a pedir la siguientes cervezas, no, era solo porque a la séctima te dan queso fresco con aguacate y salsa de guajillo. Quería echarme unos taquitos con tortillas calientitas que taban echando en ese rato, saliditas del comal. Como taba buena la pática les dije que por qué no nos íbamos a mi cantón pa´ seguir paticando allá. Sin esperar respuesta le llamé a mi Puchunga, le pregunté si me daba permiso de que juéramos, que invitara a la comadre Salomé pa que le diera permiso a Vitorio estar con nosotros. Como mi vieja y la de Vitorio son muy amigas, no se le hizo mala la idea y me dijo que sí. Que iba a preparar unas galletitas con atún y que para cenar que pediríamos tacos. Cuando les dije que taba autorizado que juéramos, todos estuvieron de acuerdo. Les dije que qué les parecía si yo me adelantaba y Chón con Flor acompañaban a Vitorio para convencer a mi comadre Salomé. Asina le hicimos. Por eso nadien iba conmigo cuando la ponchada de la llanta. Ya taba casi escuro cuando se estacionaron delante de mí, Vitorio y su vieja en una camioneta y, atrás de mi Forcito, Chón en su Vochito acompañado de Flor. Ya pa´qué, pensé mientras guardaba el gato y la llave de cruz. Cuando guardé la llanta ponchada miré que por verla rodado un tramo, se madrió todita, se despanzurró. Todos se bajaron a ver qué se me ofrecía, que mi Púchun les estuvo llamando, que yo no llegaba, que si no me ´bía pasado nada porque, me ´tuvo llame y llame y yo no le contestaba. Les dije que todo ´taba bien, que sólo jue la llanta, que ya la ´bía cambiado. Esperaron que me arrancara, garrara camino y se jueron detrás de mí. Antes de llegar a mi cantón pasamos a un Otso por unas cheves bien helodias. Se nos jue la noche pática y pática, nosotros en la azotea y las tres mujeres güiri güiri en la sala, con su botella de beilis y su mezcal de coco que tanto les encanta. Y dije tres porque mi comadre Choforita, esposa de Chón, llegó en un tatsi a invitación de mi Púchun. En lo que paticamos, me dijieron que por qué no iba yo a onde se ´tuvieron llevando las llantas del llantatón. Que juera yo a buscar una llanta güena pa que me sirviera de gallito, pero, eso ya se los paticaré otro día porque, ¿qué créen?… ya se terminó de nuez el espacio, asina que, áhi´nos pa l´otra. Graciotas.