Pateando la latita (10).
Por: Enrique Castillo González
¿10?… Si, esta es ya la décima ocasión, antes bajé 9 veces y lo hice desde mi departamento, del piso 7 a la azotehuela, y, les comento, siempre que he ido a esa área del edificio he tenido experiencias interesantes.
La primera vez, ya en esa azotehuela, ocupé mi tiempo pateando una lata vacía dándole a los tanques de gas la categoría de “portería”. Solo 10 minutos después de “iniciado el partido” doña Etelvina se asomó por su ventana para gritar “¡deja de patear esa chingada lata!” exhorto secundado desde otra ventana por la señora Virgen (madre de 7 hijos).
En una de esas veces no patee la latita pues, sobre el piso jugaba con sus muñecas una linda niña de 1m 10cm -¡señorita! deja de moverte y has tus planas!- indicaba la linda niña (en modo “maestra”) a una muñequita, sentada en el piso, la alumna “” había perdido el equilibrio cayendo por un lado si, el tichmoment de la muñeca de carne y hueso me quitó de, esa mañana, patear la lata sin impórteme los gritos de Doña Etelvina.
Ahora, mis ires y venires al patio de servicio del edificio son para invocar y convocar a las musas pues la cara sería del teclado no me dice nada, y vaya si hay temas hoy.
¿Cómo es posible que las autoridades de la CDMX toleren insultos xenofobicos y reclamos intervencionistas de personas desequilibradas mismas que, sin más insultan y escupen a mexicanos mientras estos últimos hacen su trabajo? Va otro giro al tornillo.
Me estoy enterando del retiro de sendas estatuas sentadas esas en una banca de hierro dentro del Jardín Tabacalera, los acomodados monumentos son copia de icónicos personajes de las luchas Izquierdosas Latinoamericanas, explico.
La joven Alcaldesa de la Delegación Benito Juárez, en un acto de Gobierno ordena quitar las estatuas del Ché Guevara y de Fidel Castro, estas conmemoraban el hecho de que los dos aventureros se conocieron ahí (¿1957?) para después, a bordo del Granma salir de las costas mexicanas a la Isla de Cuba.
Alessandra Rojo de la Vega, la referida Alcaldesa, con carácter toma esa decisión, ¿porqué resalto esto? Pues nada, la Edil es ente opositor a la ideología de la hoy poderosa 4/T, corriente política en el poder de la Administración y políticas.
Se sabe que, en el 2018 el entonces Delegado de la “Benito Juárez” colocó sendas estatuas sentadas sobre una banca de hierro sita esa dentro del parque, ahí porqué la historia cuenta “en una casa junto al parque Fidel y el Che se conocieron y entonces el futuro Comandante Castro invitó y reclutó al Médico venido de las pampas del cono sur Americano”, y nada, Ricardo Monreal sentó ahí a los revolucionarios dándole a esas estatuas el bodylenguage de simplemente estar charlando.
Ciertamente la jovencita Alessandra Rojo de la Vega no conoce, y seguramente no le interesa conocer la historia y lo icónico de esos dos sentados en la banca, si sabe los signos contenidos en esos barbudos y sabe lo duro de la vida en la Isla de Cuba desde enero de 1959, y, aunque ella, hablo de Alessandra, entiende quienes son Fidel y el Ché para los izquierdos de bolsillo, sobre todo los localizados en la CDMX Fidel y el Che son santos laicos.
Voy de regreso con las dos extranjeras (personas) que sobajaron a trabajadores mexicanos quienes simplemente hacían su trabajo; primero Ximena Pichel, argentina avecindada en México, insulta y acusa “” de negro a un Policía, ello además de confrontarlo violentamente, y la autoridad simplemente la dejó ir, días después en la recepción de un condominio en la Colonia Narvarte la señora Elizabeth Patricia escupe, insulta y agrede, provocando lesiones a la encargada de la seguridad en ese edificio, hasta este momento ni la guardia lesionada y sobajada ni la administración del edificio han aquerellado nada. Sea entonces.
Podemos pensar… en la CDMX, si eres extranjero desequilibrado puedes insultar, agredir e insultar a autoridades y ciudadanía, y si te reclaman con escribir una pinchurrienta tarjeta diciendo “ups, han ustedes habrán de perdonar”. Así, desde esta azotehuela donde se mezclan las aromas de guisados, olores de detergentes y cloro; donde rebotan los sonidos de motores de autos, clinck, clonck’s de trastos y lejana música salida de algún buen radio regreso a verme de frente con la pantalla de mi ordenador.
Podrá calificarse como “demasiado aventurado” el vaticinar los efectos del “juicio popular” contra aquellas personas agresivas. Quien, con acento de cantante de tango armó un quilombo y ahora le da miedo hasta salir de su habitación, y la otra mugrosa quien esputó contra una guardia dentro de la recepción, seguramente el juicio popular la castigará.
Fidel y Ernesto Guevara ¿regresarán por tercera vez al parque de la Tabacalera? se pone interesante el teatro político.
Último patrullaje.- tal cómo en su momento lo hizo Ángel Aguirre hoy Adán Augusto echa mano al “Grupo de Coordinación”, grupo ahora nombrado “mesa de orden y paz”; acá en el Think Tank casi adivinamos …-tal como lo hicieron con el “caso Ayotzinapa” igualito lo harán con el asunto del Jefe policiaco creador de una pandilla atomizada en Tabasco, ¡fue el Ejército! dirán.
Balazo al aire.- pateando la lata.
Gregueria.- Linda Charlot… vaya si eres idéntica a tu abuelo y tocayo, más no te apures, el maquillaje hará maravillas. Mi niña de 3 años.
Oximoron.- ese pochitoque no sabe nadar.
Haiku.- necesito tocarte
y rozar tu piel,
mi mariposa 🦋 azul.