Rogelio Agustín
Chilpancingo, Gro. El obispo emérito de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, confirmó que durante los últimos meses, La Familia Michoacana (FM) ha tratado de arrebatar a “Los Tlacos” o “La Federación” el control de la Sierra, lo que ha recrudecido los enfrentamientos en diferentes puntos de las partes altas.
En la iglesia del tradicional barrio de San Mateo, en Chilpancingo, el jefe religioso destacó que células de la FM han estado tratando de llegar a Tlacotepec, cabecera municipal de Heliodoro Castillo a través de la comunidad de El Caracol.
En esa comunidad, desde mayo pasado, los habitantes han denunciado ataques con drones artillados, lo que ha provocado el desplazamiento de la mayoría de las familias, particularmente de las mujeres y los niños.
“Están también avanzando por Toro Muerto y otro punto por ahí, donde se están fortaleciendo”, dijo Rangel Mendoza.
Hizo votos porque la situación que prevalece en la Sierra no vaya a “crispar” aún más la situación que se vive en la entidad en materia de inseguridad.
Cuestionado sobre la violencia que se recrudeció en Chichihualco, Rangel Mendoza destacó que sobre dicho conflicto no puede hablar directamente, pero de acuerdo con la información que obra en su poder, se trata de un grupo que antes estuvo en la Sierra y que ahora regresa con el apoyo de la FM.
Respecto a la posibilidad de que alguno de los grupos que se disputan el control de la Sierra le haya pedido mediar para detener los enfrentamientos, el obispo emérito aseveró: “Por ahora no…yo soy el mal querido”.