Iguala, Gro.- El aspirante a la alcaldía de Iguala, Erik Catalán Rendón negó que el ataque armado del pasado 3 de febrero haya sido una agresión directa en su contra.

Durante una conferencia de prensa, Catalán dijo que el sábado pasado se encontraba en una comida con transportistas con quienes celebraba el Día de la Candelaria cuando “un grupo de personas descendieron de un auto de color rojo y accionaron sus armas de fuego en contra de las personas que me acompañaban”.

Negó a su vez que el ataque se perpetrara mientras estaba en movimiento, como surgieron versiones durante el fin de semana. “Estaba comiendo con los compañeros cuando sucedió la agresión y ahí me tiré al piso, después salieron los demás compañeros después de repeler la agresión”. Al mismo tiempo, aclaró que la hermana de la gobernadora no se encontraba en el lugar, ya que surgieron los rumores de su presencia. «La hermana de la gobernadora nunca estuvo con nosotros», puntualizó.

Si me preguntas, claro que tengo miedo, pero no fue un acto en contra de Erik Catalán fue un acto en contra de la ciudadanía, si hubiera sido en mi contra no estaríamos aquí platicando, las medidas que voy a tomar son de precaución, no me voy a encerrar, voy a seguir trabajando, lo único que tengo que hacer es encomendarme a Dios”, afirmó.

También añadió que el único vehículo que resultó afectado por los disparos de arma de grueso calibre fue la camioneta Suburban blindada en la que se transportaba y la cual se encontraba afuera del lugar donde comían.

Según detalló, desde el 25 de julio del año pasado recibió la primera de cinco amenazas de muerte a través de mensajes, mismos que dijo, no han sido firmados por ningún grupo delincuencial ni ninguna persona en particular, razón por la que presentó una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE) y por lo que se le brindaron las medidas de seguridad necesarias.

Aunque no quiso responsabilizar a nadie en específico hasta que la FGE determine quienes son los responsables, no descartó la posibilidad de que se trate de “fuego amigo”, con sus adversarios políticos internos en la búsqueda de la candidatura a la presidencia municipal. “El fuego amigo puede ser por miedo de que uno va avanzando, vamos trabajando, vamos caminando, estamos preparados para la Guerra Sucia que se viene”.

A pesar de los sucesos, Erik Catalán aseguró que seguirá trabajando por Iguala y reiteró deseo de contender por la presidencia municipal, “hoy reafirmo mis ideales… porque la ciudad que tanto amo necesita cambiar”, sentenció.

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