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Ciudad de México, Octubre 22.- Olvidar nombres, perder el hilo de una conversación o sentirse mentalmente “desconectada” puede ser desconcertante, especialmente cuando ocurre con frecuencia.
Sin embargo, para muchas mujeres, estos cambios no son una señal de alarma, sino un síntoma de la menopausia conocido como niebla mental.
Comprender cómo afectan las hormonas al cerebro y qué factores pueden intensificar estos cambios permite tomar decisiones informadas para cuidar el bienestar general durante esta etapa.
¿Qué es la niebla mental en la menopausia?
Aunque es uno de los síntomas menos conocidos, la llamada niebla mental —también conocida como confusión o lentitud cognitiva— es una realidad para muchas mujeres durante la menopausia.
Se trata de una sensación de falta de claridad mental que puede manifestarse en olvidos frecuentes, dificultad para concentrarse o problemas para realizar varias tareas a la vez.
De acuerdo con el Instituto de la Menopausia, a partir de los 45 años es común que algunas mujeres noten pequeños lapsos de memoria, como olvidar nombres, fechas o detalles cotidianos que antes recordaban con facilidad.
Este fenómeno suele ir acompañado de cierta confusión mental que puede interferir con la atención y el rendimiento laboral o personal.
El mismo instituto señala que cerca del 60 % de las mujeres de mediana edad reportan algún tipo de dificultad para concentrarse o para recordar información nueva.
Aunque puede resultar frustrante, se trata de un síntoma temporal relacionado con los cambios hormonales propios de esta etapa.
¿Por qué la menopausia afecta al cerebro?
El cerebro y las hormonas están profundamente conectados. Antes de la menopausia, los ovarios producen estrógeno, una hormona que no solo regula el ciclo menstrual, sino que también favorece el funcionamiento cerebral.
Según un artículo de Banner Health, el cerebro cuenta con receptores de estrógeno especialmente concentrados en el hipocampo, la región que controla la memoria, el pensamiento lógico y el aprendizaje.
El estrógeno cumple varias funciones esenciales en el cerebro:
Potencia la memoria y el aprendizaje.
Facilita la comunicación entre las neuronas, lo que optimiza la transmisión de información.
Protege las células cerebrales de los radicales libres y evita el daño en el ADN.
Mantiene la agudeza y claridad mental, contribuyendo al bienestar cognitivo general.
Cuando los niveles de estrógeno comienzan a disminuir —como ocurre durante la perimenopausia y la menopausia—, esa red de apoyo se debilita. En consecuencia, el cerebro puede volverse más vulnerable a los cambios químicos y al estrés.
De acuerdo con la Mayo Clinic, esta caída hormonal también altera el equilibrio de neurotransmisores clave:
Serotonina: regula el bienestar emocional y el sueño. Su reducción puede generar irritabilidad, ansiedad o insomnio.
Dopamina: influye en la motivación y la concentración. Cuando disminuye, es común sentirse distraída, desanimada o sin energía.
Noradrenalina: controla la respuesta al estrés. Un desequilibrio puede causar nerviosismo, palpitaciones o tensión arterial elevada.
Por ello, la menopausia no solo implica cambios físicos, sino también variaciones emocionales y cognitivas. Además de la niebla mental, muchas mujeres reportan altibajos de ánimo, ansiedad, depresión leve o irritabilidad.
¿Cuánto tiempo puede durar la niebla mental?
La duración de la niebla mental varía considerablemente entre mujeres. Puede aparecer y desaparecer dependiendo de los niveles hormonales, el estilo de vida y la salud general.
Algunas mujeres comienzan a notarla durante la perimenopausia, los años previos al cese de la menstruación; otras, en cambio, la sienten más intensa después de la menopausia.
El National Institute on Aging (NIA) explica que la confusión mental suele disminuir con el tiempo, conforme el cuerpo se adapta a los nuevos niveles hormonales. Sin embargo, ciertos factores del estilo de vida pueden prolongar o intensificar los síntomas:
Estrés crónico o ansiedad constante.
Falta de sueño reparador.
Trastornos de la tiroides o deficiencias nutricionales (como vitamina B12 o hierro).
Sedentarismo o mala alimentación.
Adoptar hábitos saludables —como dormir bien, hacer ejercicio y mantener una dieta rica en frutas, verduras y omega 3— puede ayudar a reducir los episodios de niebla mental y mejorar la claridad cognitiva.
¿Cuándo es momento de acudir al médico?
Experimentar cierto grado de confusión o lapsos de memoria es normal durante la menopausia. Sin embargo, hay situaciones en las que conviene consultar con un profesional de la salud.
Si los olvidos interfieren con tu vida diaria, afectan tu desempeño laboral o social, o notas que los síntomas empeoran con el tiempo, es recomendable buscar apoyo médico.
En algunos casos, los problemas cognitivos pueden estar relacionados con otras condiciones de salud, como:
Trastornos tiroideos.
Depresión o ansiedad crónica.
Deficiencias vitamínicas.
Trastornos neurológicos incipientes.
La terapia de reemplazo hormonal (TRH) puede ayudar a algunas mujeres a aliviar los síntomas de la menopausia, incluida la niebla mental. No obstante, no es la opción adecuada para todas.
Además, Banner Health, señala que los estudios sobre la eficacia de la TRH muestran resultados mixtos. Por ello, la decisión de iniciar este tipo de tratamiento debe tomarse junto con el médico, valorando los beneficios, los riesgos y la historia clínica de cada paciente.
La niebla mental no es un signo de pérdida de capacidades ni un síntoma imaginario: es una manifestación real de los cambios hormonales que acompañan la menopausia.
Aunque suele ser temporal, puede resultar molesta y afectar la confianza personal. Si los olvidos o la confusión se vuelven persistentes, buscar orientación médica es fundamental para descartar otras causas y encontrar estrategias de tratamiento adecuadas.