Comisión antichapulín en Morena
Por: Jesús Lépez Ochoa
El intento de Morena por dejar de ser el partido “atrapa todo” en que convirtió durante su búsqueda de hegemonía podría decantar el exceso de aspirantes a candidaturas atraídos por la conveniente fuerza del morenismo en estados como Guerrero.
El politólogo alemán Otto Kirchheimer creó el término catch-all party (en español partido atrapa todo) en 1966, categoría que utilizó para definir una nueva de tipología de partidos políticos que surgieron después de la Segunda Guerra Mundial y que buscaban un mayor éxito electoral sacrificando su compromiso ideológico.
En éstos sucedía lo mismo que en Morena que ha venido incorporando a sus filas a personajes de todo credo, incluidos de la derecha, su polo ideológico opuesto, y a quienes en anteriores elecciones aunque militaban en partidos de supuesta izquierda no dudaron en hacer alianza electoral con los conservadores con tal de ser candidatos.
Así vimos en Guerrero a personajes como Beatriz Mojica Morga o Joaquín Badillo Escamilla convertirse a morenistas luego de hacer campaña contra Andrés Manuel López Obrador y a favor del panista Ricardo Anaya en 2018, y ser diputados locales en 2021. La primera hoy es senadora, y el segundo repite en el Congreso del estado.
Este par de ejemplos locales ya están adentro y buscan las candidaturas al gobierno del estado y la alcaldía de Acapulco, al igual que muchos otros propios y advenedizos que podrían no tener tanta suerte como ellos si no pasan el nuevo filtro aprobado el pasado domingo en la Octava Convención Nacional Ordinaria de Morena.
La nueva Comisión Nacional Evaluadora de Incorporaciones integrada por Luisa María Alcalde, Carolina Rangel, Alfonso Durazo, Armando Bartra y Epigmenio Ibarra estará a cargo de evaluar los pros y los contras de incorporar a personajes reconocidos de otros partidos, sobre los cuales se asegurará, al menos eso pretende, de que estén alineados con los principios de austeridad del partido que los carísimos relojes y otras prendas de algunos ponen en duda.
Esta nueva comisión se constituye además como el órgano antichapulín pues ha establecido como perfiles cuestionables no solamente a aquellos que hayan sido sentenciados por delitos graves, sino a aquellos que en pasados procesos internos al no darles una candidatura se fueron a otros partidos.
Es el caso en Acapulco de Yoshio Ávila, quien pese a que fue candidato de Movimiento Ciudadano se fotografía con personajes de Morena cada que puede.
Y es que aún cuando encuestas como la de Demoscopia Digital ponen al MC como segunda fuerza en Guerrero con 11.2 por ciento, lo cierto es que también indica que la alianza de Morena con el PT y el Verde tiene 51.4 por ciento, y Morena por sí solo trae 48.7 por ciento.
Esto indica que Morena está en una posición en la que puede sacudirse, sin mayor problema a los oportunistas.
EL TON Y EL SON
Habrá que ver cómo resolverá Morena el tema de su candidatura en Guerrero donde Félix Salgado Macedonio triplica a los demás aspirantes. Por cierto que en la encuesta de Demoscopia aparece por primera vez la funcionaria federal Esthela Damián con 6.3 por ciento.
Un porcentaje muy bajo, pero superior a los obtenidos por la ex alcaldesa de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández, el dirigente estatal Jacinto González, o el diputado Pablo Amílcar Sandoval. De hecho aparece en cuarto sitio por debajo de Beatriz Mojica y la alcaldesa de Acapulco Abelina López Rodríguez.
Una de dos, o a doña Esthela le está funcionando su campaña a larga distancia en Facebook, o de plano todos los que aparecen por debajo de ella han sido tan grises que ya los rebasó una desconocida.