Contribuyen Erick y Evelyn a la cultura de prevención civil
Por: Ricardo Castillo Barrientos
Por primera vez en la historia de huracanes, ciclones, tormentas y depresiones tropicales, en Acapulco, en ambas costas y gran parte de la entidad, se han asumido medidas preventivas oficiales, -aunque no las suficientes- para atenuar los efectos devastadores de los imponentes fenómenos meteorológicos, más frecuentes y con mayor intensidad, dentro de la Escala Saffir-Simpson, con cinco categorías de acuerdo a la velocidad de los vientos.
Después de las trágicas experiencias de los huracanes Otis y John, el Gobierno del Estado puso en marcha protocolos de actuación en materia de prevención protección civil, tendiente a contrarrestar el impacto del huracán Erick, en las zonas costeras, montañosas y Centro, y causará el menor daño. Estos protocolos continuarán en lo sucesivo en temporadas de lluvias y huracanes.
El Gobierno de la República se anticipó con unidades móviles de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), para restablecer de inmediato el servicio de energía eléctrica; la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), se proveyó de plantas de agua potable; la SEDENA, MARINA y Guardia Nacional, desplegaron más de cinco mil elementos para la operación del Plan DN-III y Plan MARINA, con alimentos básicos, colchonetas, cobijas, y la fuerza física de los elementos castrenses para la limpieza y ayuda en colonias, comunicades y caminos.
Los daños resultaron menores a los meteoros de 2024 y 2025, sin embargo, como ocurre siempre, resultaron afectadas las familias más vulnerables y humildes, que tienen sus casas con techumbre de láminas o tejas, que por la fuerza de los vientos son desprendidas, irremediablemente.
Hubo solo una víctima que lamentar, una bebita en San Marcos; sin medidas preventivas las pérdidas de vidas serían mayores y esto ya es un buen avance en la concientización ciudadana de auto protección frente a estos siniestros.
No debemos regatearle créditos a la presidenta Claudia Sheinbaum y a la gobernadora Evelyn Salgado, por estar atentas e informando oportunamente sobre el curso y evolución de Erick, hasta su degradación y la intervención inmediata de ayuda en la Costa Chica, siendo la región más afectada.
Como resultado de las tres últimas y desafortunadas experiencias, la gobernadora Salgado Pineda, dio a conocer que su administración presentará en breve, un decreto ante el Congreso del Estado, donde se establecerán protocolos de actuación gubernamental y responsabilidad ciudadana ante fenómenos naturales, así se establecería una nueva y muy necesaria política pública en materia de prevención y protección civil, la cual se carecía.
Este decreto será un parteaguas a nivel nacional, en la implementación y fortalecimiento de una cultura de prevención civil, que vendría a evitar desastres de gran dimensión como los ocurridos con antelación en nuestro territorio y en otros sitios del país.
Marea Baja.- Como gato boca arriba y por todos los medios, el PRD se niega a morir, después de perder el registro nacional y no alcanzar el tres por ciento requerido por la ley electoral, en la pasada elección.
Los famosos “Chuchos”, se convirtieron en dueños de la franquicia, misma que llevaron al abismo por sus ambiciones políticas, personales y de grupo.
Aquí en Guerrero obtuvieron 8.52% de la votación, permitiéndole el registro local, pero se avizora en las elecciones de 2027, que esa cifra disminuya y darse la estocada final.
En vía de mientras, Evodio Velázquez, coordinador de los restos perredistas, se empeña en exigir al IEPC le entregue suculentas prerrogativas, cuando el Tribunal Electoral ha considerado que no tienen derecho, por ser un partido local de reciente creación, por lo tanto, tendrán que esperar hasta la siguiente elección a efecto conocer si mantiene el registro o su extinción.
Marea Alta.- Por tercera ocasión, el chef español José Andrés, director de World Central Kitchen (WCK), se apresuró a venir nuevamente en nuestra ayuda, a causa de los daños provocados por el huracán Erick, proporcionando comida caliente a centenares de paisanos, sin posibilidades de obtener alimentos, como lo hicieron con la instalación de comedores en Acapulco, después de Otis y John.
WCK es una organización no gubernamental de carácter altruista, que hace presencia cuando ocurren desastres naturales o guerras, como en la Franja de Gaza, Haití, Acapulco y ahora, la Costa Chica.
En diversos países esta organización ha recibido reconocimientos y distinciones por su labor humanitaria, sin que ninguna autoridad de Acapulco y Guerrero, se hayan molestado en darles las gracias y menos un reconocimiento que a pulso lo tienen bien ganado.
Maremoto.- Resulta que algunos políticos con poder y con recursos oficiales, muy pocos por cierto, están haciendo acto de presencia para llevar algún tipo de ayuda a familias afectadas por el reciente huracán, entre otros, los senadores Félix Salgado, Beatriz Mojica y la diputada federal Yoloczin Domínguez, así como, el dirigente de MORENA, Jacinto González, quienes ni tardos ni perezosos incursionaron en territorios devastados como si fuera campaña electoral.
El senador priísta Manuel Añorve, no podría quedarse atrás y exigir a las Secretarías de Hacienda y de Comunicaciones, autoricen un presupuesto emergente para la reparación de carreteras y caminos, cuando en los hechos, han venido haciendo esa tarea por órdenes de la presidenta Sheinbaum. Bueno, tratan de llevar agua a su molino político por lo que viene, lo más importante para ellos.