Por: Servicios AINI
Una maestra de preescolar intentó calmar a sus alumnos, de entre 3 y 5 años, durante una balacera, cantando prácticamente a gritos la canción “Shake it Off” de la cantautora estadounidense Taylor Swift, en la ciudad de Guaymas, en Sonora.
La dura escena fue grabada y difundida a través de redes sociales, donde se ve a los menores resguardarse debajo de su pupitre durante los disparos, como ya ha ocurrido en otras ocasiones en los puertos de Guaymas y Empalme durante el presente ciclo escolar.
Los hechos ocurrieron a las 13:00 del martes en la zona turística de Miramar, en Guaymas, cuando sicarios a bordo de una camioneta interceptaron a dos pasajeros de un vehículo sedan, a quienes acribillaron a balazos con ráfagas de rifles de asalto en una zona escolar con tres planteles educativos en las inmediaciones.
“¡Come on, I can hear you, shake it off, shake it off!”, cantó la maestra a gritos para que los niños se resguardaran debajo de sus mesas y no escucharan las ráfagas. La Secretaría de Seguridad Pública en Sonora informó que en el vehículo en el que viajaban los dos hombres privados de la vida por ataque directo en Guaymas, servicios periciales de la Fiscalía en Sonora recolectó un arma larga de rifle de asalto y un arma corta.
Además, fue asegurada una bolsa de plástico con narcóticos, “uno de los hombres cuenta con antecedentes penales por delitos de robo de vehículo y robo con violencia”, dicta el informe oficial preliminar.
Cerca de donde ocurrió la doble ejecución en Guaymas, hay tres planteles educativos: el Colegio Americano de San Carlos; el Instituto Cervino; y un preescolar para niños con capacidades diferentes.
En este último fue donde los estudiantes tuvieron que quedarse resguardados por más de dos horas hasta que las autoridades pudieron asegurar la zona para que sus padres los recogieran.
El pasado octubre, autoridades educativas del gobierno de Sonora advirtieron que tomarían represalias, al reprobar la acción de un maestro en Guaymas que realizó un simulacro de enfrentamiento armado, para enseñarle a sus alumnos cómo actuar en caso de una balacera.
A los dos días la realidad se impuso cuando en el puerto de Empalme, los alumnos tuvieron que resguardarse de un enfrentamiento, donde uno de los objetivos de los sicarios corrió hacia uno de los planteles educativos para refugiarse.
En los últimos días, en Sonora, dos ataques armados han causado estragos en víctimas inocentes: el pasado sábado en San Luis Río Colorado un niño murió y dos fueron heridos por bala en un enfrentamiento armado; el lunes en Guaymas, una mujer y su hija de tres años resultaron heridas en el fuego cruzado de una balacera.
Los puertos de Guaymas, San Carlos y Empalme, son una zona conurbada junto al mar de Cortés donde hay zonas turísticas, pesqueras e industriales, una región disputada por varios grupos criminales para el trasiego de droga por vía marítima y después hacia la frontera con los Estados Unidos a través de Sonora.