Los altos precios en la energía, derivado esto de la guerra entre Rusia y Ucrania, ha generado una crisis que ha ralentizado el crecimiento mundial de cara al 2023, además que mantendrá la inflación en niveles altos, pero más moderados que en 2023, advirtió la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
En sus Perspectivas Económicas, el organismo anticipa que la economía global crezca 2.2% en el 2023, con una ligera recuperación para 2024, con un crecimiento de 2.7 por ciento.
De acuerdo con el reporte de la OCDE, la economía global se enfrenta con retos importantes además de que el crecimiento ha perdido fuerza, la inflación se ha mantenido alta y persistente, la confianza ha disminuido y existen altos niveles de incertidumbre.
“La guerra en Ucrania ha incrementado los precios de manera importante, especialmente en el sector energético, agregando presiones inflacionarias en tiempos donde los costos de vida se venían incrementando rápidamente en el mundo. Las condiciones financieras globales se han apretado significativamente, en medio de las vigorosas e inusuales acciones de los bancos centrales alrededor del mundo que han elevado las tasas de interés en los meses recientes”, señaló Álvaro Pereira, economista en jefe interino.
Con respecto a la inflación, la estimación es que se mantenga alta en muchas economías por un periodo más largo del esperado anteriormente, esto a pesar de los esfuerzos hechos en política monetaria de los bancos centrales y el gradual mejoramiento en las cadenas de suministros.
La inflación anual para los miembros de la OCDE será de 9.4% para el cierre de 2022 y se anticipa que caiga a 6.5% en 2023 y 5.1% en 2024, cuando se observe un alivio de los problemas en cadenas productivas, los precios de materias primas se moderen y la política monetaria menos acomodaticia comience a surtir efectos.
Mientras que la región de América Latina, las previsiones con que crecería 1.2 por ciento, donde México tendría una expansión del PIB de 1.6 por ciento.
“Para México esperamos un crecimiento de 2.5% para este año, que es una revisión al alza con respecto a nuestra anterior previsión y una desaceleración en el 2023, con un crecimiento de 1.6% y un repunte hasta el 2.1 en el 2024”, expuso en conferencia Alberto González, jefe de división interina de la OCDE.
Además, anticipa que la inflación para México concluya en 8% para 2022 y disminuirá a 5.7% para 2023. Prevé que será hasta 2024 cuando se alcance la meta-objetivo del Banco de México, cercana a 3.3 por ciento.
Oportunidades tributarias
González comentó que el organismo ve oportunidades para ampliar la base tributaria en México, lo cual permitiría dar respuesta a necesidades de gasto en educación y salud y al mismo tiempo mantener el fuerte compromiso con la prudencia fiscal que México ha venido mostrando a lo largo de los últimos años.
“México es una economía con un gran potencial de crecimiento y vemos oportunidades de reformas para hacer realidad ese potencial, una de ellas es reducir las brechas de género y facilitar la participación del laboral de la mujer y para ello es importante reforzar la educación, la red de guarderías y reducir la informalidad”.
También consideró que es necesario reducir los mecanismos de resolución de conflictos laborales, y también los costos para formalizar empresas.