Servicios AINI
Ginebra, Suiza. Los glaciares suizos perdieron en los últimos dos años en torno a un 10% de su volumen, tanto como en el periodo 1960-1990, debido al cambio climático, indica un estudio publicado este jueves.La falta de nieve en invierno y las temperaturas extremas registradas en verano propiciaron un duro golpe a estas importantes masas de hielo, advirtió el grupo de expertos que estudia la criósfera (zonas congeladas del planeta) en la Academia Suiza de Ciencias Naturales.
Sus conclusiones no dejan lugar a dudas: «Los glaciares suizos se derriten cada vez más rápido». El derretimiento fue de un 6% en 2022 y se situó en torno al 4% en 2023, los dos años con mayores pérdidas de volumen desde el inicio de estos registros, señala el informe.
«Es una combinación de la muy mala sucesión de extremos meteorológicos y del cambio climático» que hace esos extremos más probables, explica Matthias Huss, quien dirige la red de monitoreo de los glaciares suizos (Glamos). «Si seguimos el ritmo de estos últimos años (…) cada año se vivirá un mal año», subraya. «Vimos cambios tan fuertes en el clima en los últimos años que es totalmente posible imaginarse este país sin glaciares», reconoce el científico.
Huss subraya sin embargo que una acción decisiva de «estabilización del clima» que implique llegar a cero emisiones de CO2 podría permitir conservar «un tercio del hielo formado en Suiza».
Esto significa «que todos los pequeños glaciares habrán desaparecido y que los grandes glaciares serán mucho más pequeños, pero aún quedará algo de hielo en las regiones más elevadas de los Alpes y algunos glaciares que podremos enseñar a nuestros nietos», matizó Huss. El derretimiento golpeó la totalidad del país, considerado como la torre de agua de Europa gracias a sus 1.400 glaciares, que alimentan numerosos lagos, ríos y riachuelos.