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Ciudad de México, Seis meses después de que las autoridades aseguraran el rancho Izaguirre, el fiscal de Jalisco, Salvador González de los Santos, reconoció que los trabajos iniciales de búsqueda, que incluyeron el uso de maquinaria y binomios caninos, fueron insuficientes. Esto, luego de que hace unos días el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco descubriera evidencias que sugieren que el lugar pudo haber funcionado como un campo de exterminio del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

González de los Santos, quien fue designado fiscal estatal el pasado diciembre; a través de un video difundido el martes, anunció además una investigación para esclarecer posibles omisiones por parte de las autoridades que participaron en los trabajos previos.

El rancho, ubicado en el municipio de Teuchitlán, fue intervenido en septiembre de 2024 tras un operativo de la Guardia Nacional, en el que fueron detenidas 10 personas y rescatadas dos más que estaban privadas de su libertad, explicó el funcionario.

Durante la primera inspección, las autoridades localizaron un cadáver envuelto en plástico y diversas pertenencias de posibles víctimas y presuntos integrantes del crimen organizado. La investigación inicial incluyó el uso de maquinaria pesada, binomios caninos y tecnología especializada para la detección de restos humanos.

Sin embargo, la reciente intervención de Guerreros Buscadores de Jalisco reveló nuevas evidencias que apuntan a la magnitud de la violencia ejercida en el sitio. Hasta el momento, se han identificado al menos cuatro puntos con presuntos restos humanos, lo que sugiere que el lugar pudo haber operado como un campo de exterminio.

Ante esto, el fiscal estatal admitió que las labores de búsqueda realizadas en septiembre y octubre de 2024 no fueron suficientes para detectar la magnitud de lo ocurrido. «Estamos llevando a cabo un análisis forense detallado y minucioso para determinar la procedencia de los restos y los objetos encontrados», declaró el funcionario.

El fiscal aseguró que los indicios encontrados por el colectivo no corresponden a actividad delictiva posterior a la intervención de la Guardia Nacional en septiembre pasado.

Este miércoles, el gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, aseguró que su administración trabaja en total coordinación con el gobierno federal en la investigación del campo de exterminio descubierto en Teuchitlán.

En un mensaje público, el mandatario enfatizó que el caso requiere una respuesta prioritaria y sostenida, con la participación de todas las instancias de gobierno y la sociedad civil.

«En Jalisco nadie se lava las manos. Aquí estamos reunidos y trabajando el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional, la policía estatal, la Fiscalía del Estado de Jalisco, la Fiscalía General de la República y el Centro Nacional de Inteligencia. Todos actuamos de manera coordinada y con voluntad política», afirmó el mandatario.

Lemus destacó que, aunque los hechos no ocurrieron en su administración ni en la de la presidenta Claudia Sheinbaum, ambos gobiernos están comprometidos en esclarecer lo sucedido y deslindar responsabilidades.

Informó que desde las primeras horas del día se comunicó con la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, y con el secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, quienes confirmaron que la Fiscalía General de la República atrajo la investigación.