Medicina tradicional mexicana
Por: Alejandra Salgado Romero
“La medicina alópata, las medicinas tradicionales mexicanas y mundiales, así como las distintas medicinas alternativas, son más que un conjunto de propuestas terapéuticas; encierran cada una, un modelo médico con una visión del mundo diferente, producto de la cultura que les dio origen.”
Carlos Paul
La Medicina Tradicional Mexicana tiene sus raíces en profundos conocimientos que los distintos pueblos indígenas d nuestro país acumularon, a través de su historia, sobre la salud y la enfermedad. Representan eficientes sistemas de atención, con terapeutas, métodos de diagnóstico y curativos, que se explican desde una forma de entender el mundo de origen indígena,(Cosmovisión) incorporando y ordenando elementos de otras culturas y poblaciones. En estas culturas, se considera que el ser humano es un todo, en el que no se puede separar el cuerpo de la mente y el espíritu. Por ende, cada una de las partes del cuerpo tiene que ver con todas las demás, además de que está conectado y en íntima relación con los demás seres humanos, las plantas, animales, objetos y con los demás elementos de la “naturaleza”: el aire, el agua, la tierra, las divinidades, los planetas y todo el cosmos en general, los cuales poseen vida y son sagrados.
Nuestros ancentros sostenían que la salud es un estado de equilibrio interno entre el cuerpo, la mente y el espíritu, que está en armonía externa o equilibrio con los demás seres humanos, la naturaleza y el cosmos en general. También afirmaban que la enfermedad es la consecuencia de la ruptura de ese estado de equilibrio y que todas las causas de enfermedad pueden ser originadas por el propio organismo. Por ello, tenían y tienen claro que realizar acciones contrarias o de falta de respeto contra la familia, la comunidad, la naturaleza y las divinidades, -rompiendo el equilibrio-, puede revertir en su contra generando fuerzas nocivas que a su vez lo afectan, así como a su familia y comunidad.
En México fruto de la diversidad cultural, existen diferentes grupos de población con distintas concepciones de la salud y enfermedad y maneras de atenderlas. Cada concepción y visión, se traduce en formas concretas para prevenir la enfermedad, restituir la salud, aliviar o mitigar el dolor y enfrentar la muerte. Por ello, es necesario ofrecer al personal de salud herramientas interculturales, que le permitan desarrollar un proceso comunicativo suficiente entre formas de comunicación con grupos culturales. La atención a la salud que realizan las y los terapeutas tradicionales y parteras, es fiel reflejo de esta forma de medicina: son un poco médicos, psiquiatras y sacerdotes.
Resulta fundamental recordar que en dentro de la cultura mexica, la medicina tenía un carácter mágico-religioso, y en nuestras culturas había una división de acuerdo con las funciones médicas que se realizaban y una jerarquización. Los médicos eran llamados ticitl, y eran considerados sanadores, magos y sacerdotes. En el caso de los mexicas, creían que la salud de un hombre se daba gracias al equilibrio entre el frío y el calor y cuando este balance se rompía, aparecía la enfermedad. Los conocimientos se pasaban de forma oral, se heredaban de padre a hijo, y posteriormente se plasmaron en códices.
La mayoría de los analistas reconocen tres fuentes básicas en el desarrollo de la medicina tradicional mexicana entre los Siglos XV y XVIII (prehispánico, hispánico y afro), así como toda una serie de fuentes complementarias que se fueron incorporando, sobre todo entre los Siglos XVIII y XXI. La medicina tradicional abarca una amplia variedad de terapias y prácticas que varían entre países y regiones. En algunos países se denomina medicina “alternativa” o “complementaria”, se ha utilizado desde hace miles de años, y quienes la practican han contribuido enormemente a la salud humana, en particular como proveedores de atención primaria de salud, a nivel de la comunidad.
La Medicina Tradicional incluye prácticas y experiencias terapéuticas inmersas en contextos culturales específicos, las cuales implican el uso de medicinas con base de hierbas, partes de animales y/o minerales. Asimismo, incluyen terapias sin medicación, como es el caso de la acupuntura, las prácticas manuales y las terapias espirituales. Actualmente es reconocida como un recurso fundamental para la salud de millones de seres humanos, un componente esencial del patrimonio tangible e intangible de las culturas del mundo, un acervo de información, recursos y prácticas para el desarrollo y el bienestar, y un factor de identidad de numerosos pueblos del planeta.
La promoción de la salud y la medicina tradicional se entrelazan, evidenciando la rica diversidad cultural y la herencia histórica de nuestro país y de cada estado y región. La promoción de la salud constituye un pilar fundamental para mejorar la calidad de vida de toda sociedad y la medicina tradicional, arraigada en las creencias y prácticas ancestrales de diversas comunidades indígenas, desempeña un papel crucial en la atención de la salud. Esta sinergia entre la promoción de la salud y la medicina tradicional, destaca la importancia de honrar y preservar nuestra herencia cultural, siempre a favor del logro del bienestar integral de nuestra sociedad.
Les deseo una semana excelente y agradezco sus aportaciones y/u opiniones a través del correo alejandra.salgado.esdafzk@gmail.com.