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Ciudad de México, Noviembre 25.- El ejercicio en invierno es una poderosa herramienta para mantener en buen estado tu salud física y mental contra la melancolía estacional.
Aunque el clima frío y los días más cortos te inviten a hibernar bajo una manta, abandonar la actividad física tiene un impacto negativo en tu resistencia respiratoria y competencia motora, lo que finalmente disminuye tu calidad de vida.
Si te preocupa el bajón de ánimo en la temporada navideña, la ciencia tiene buenas noticias: entrenar al aire libre en invierno, o incluso en casa, te ofrece una doble ventaja para tu bienestar, impactando directamente tu metabolismo y tu estado de ánimo.
Contrario a la creencia popular de que el invierno es tiempo de sedentarismo, el ejercicio regular en esta época trae consigo beneficios medibles para la salud.
De hecho, se ha comprobado que el entrenamiento al aire libre durante el invierno requiere un gasto energético adicional para calentar el cuerpo, lo que resulta en una mayor quema de calorías en comparación con otras épocas del año.
Aquí te explicamos los principales efectos a la salud de hacer ejercicio en invierno, como explica una investigación publicada en Advanced Science y un estudio publicado en Healthcare:
Mejora la composición corporal: Se observa una reducción en la grasa corporal total (BFM) y en los indicadores de obesidad abdominal (WHR y WHtR).
Aumenta la masa muscular: El porcentaje de masa muscular esquelética (SMM) en la masa corporal total se incrementa en quienes se mantienen activos.
Optimiza el rendimiento motor: Mejora la flexibilidad, la velocidad de movimiento de las extremidades superiores, la fuerza de agarre y la resistencia cardiorrespiratoria.
Fortalece el sistema inmune: El ejercicio aumenta la producción de cuerpos inmunes, volviendo a tu cuerpo más resistente a padecimientos.
Mantiene los niveles de vitamina D: El ejercicio de intensidad moderada, de forma regular, previene la caída invernal de los niveles basales de vitamina d, esencial para la salud ósea e inmune.
¿Cómo ayuda a la salud mental hacer ejercicio en invierno?
El invierno, especialmente en latitudes donde la luz solar es escasa, puede provocar la tristeza invernal o, en casos más severos, el Trastorno Afectivo Estacional (TAE).
Los síntomas del TAE incluyen fatiga, irritabilidad, somnolencia excesiva y retraimiento social.
Afortunadamente, la actividad física es una solución contra los síntomas de la depresión, incluyendo el TAE.
Estos son los beneficios directos que el ejercicio aporta a tu salud mental durante el invierno, de acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el estudio de Healthcare:
Reduce el estrés: Disminuye la cantidad de cortisol, que es el generador del estrés.
Mejora el estado de ánimo: Se generan químicos como la dopamina, serotonina, oxitocina y endorfinas, los llamados químicos de la felicidad.
Combate la melancolía invernal: El aumento de endorfinas protege activamente contra la depresión invernal o winter mood slump.
Aumenta la autoestima: Combinado con una buena alimentación, ayuda a incrementar la autoestima.
Mejora la función cognitiva: Permite que más oxígeno llegue al cerebro, optimizando la función cerebral, la atención y la concentración.
¿Cómo hacer ejercicio en invierno sin enfermarse?
Para disfrutar de los beneficios del ejercicio en invierno, es importante que tomes precauciones para no enfermarte. El cuerpo se adapta al frío, pero hay límites y estrategias inteligentes que debes seguir.
Aquí tienes una lista de consejos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) para hacer ejercicio en invierno de forma segura y saludable:
Usa varias capas de ropa cómoda que puedas quitarte fácilmente a medida que te calientas, evitando el sobrecalentamiento, la sudoración excesiva y el enfriamiento posterior.
Consume vitamina C y líquidos: Asegúrate de ingerir vitamina C y mantenerte hidratado para prevenir enfermedades respiratorias.
Evita temperaturas extremas al aire libre: No se recomienda hacer ejercicio cuando las temperaturas son menores a cinco grados, ya que se corre riesgo para la salud.
Entrena en casa si eres principiante: Si no estás acostumbrado a hacer ejercicio, realiza actividades muy ligeras en casa, enfocadas en calentamiento y estiramiento.
Aprovecha el espacio interior: Cuando el mal tiempo te detenga, opta por clases en línea o aprovecha las tareas domésticas activas como aspirar o limpiar, ¡todo cuenta!
Camina con protección: Si las condiciones climáticas lo permiten, camina de 20 a 30 minutos al aire libre con ropa adecuada y buena protección.
Los estudios demuestran que mantener la actividad física de 3 a 5 veces por semana, ya sea trotando o en bicicleta, permite no solo prevenir el aumento de peso y la obesidad abdominal, sino también fortalecer la mente y el cuerpo contra los desafíos estacionales.
Convertir el ejercicio regular durante los meses fríos en un hábito es la estrategia más efectiva para asegurar que tu bienestar físico y emocional permanezca contigo todo el año.
