Los indolentes y los solidarios ante el desastre en Acapulco
Por: Efraín Flores Iglesias
No cabe duda que los desastres naturales sacan lo mejor y lo peor de los seres humanos. Y lo estamos constatando con los efectos catastróficos que dejó el huracán “Otis” en Acapulco.
Mientras los gobiernos estatal y federal han unido esfuerzos para atender a la población damnificada y hacer un recuento de los daños, algunos actores políticos destacan por su indolencia y valemadrismo, como es el caso de la presidenta municipal de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández Martínez, quien este jueves rindió su segundo informe de labores en la plaza cívica “Primer Congreso de Anáhuac”.
Las críticas no se hicieron esperar. A nivel nacional fue severamente cuestionada por su insensibilidad ante la tragedia y por privilegiar un evento político.
Mientras Norma Otilia Hernández festejaba su segundo año de gobierno con sus cortesanos favoritos –esos que le aplauden todas sus ocurrencias– e invitados especiales, los acapulqueños estaban de luto y buscando desesperadamente a sus familiares desaparecidos.
La gobernadora Evelyn Salgado Pineda también tenía programado rendir su segundo informe de gobierno el mismo día, pero decidió posponerlo para el próximo jueves 9 de noviembre. Y lo hizo anteponiendo la integridad de las y los guerrerenses ante la cercanía y desplazamiento del huracán “Otis” a las costas de la entidad.
La indolencia mostrada por la presidenta municipal de Chilpancingo, es entendible, porque para ella lo primero es el lucimiento personal y sus pachangas.
Es evidente que sus asesores y/o consejeros son unos incompetentes.
Afortunadamente, la sociedad civil también ha estado organizándose para ayudar a los acapulqueños que están viviendo un momento muy difícil.
También es oportuno destacar el esfuerzo que está realizando la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro) para recolectar víveres y apoyar con brigadas médicas a los habitantes de Acapulco, el municipio más afectado por el huracán “Otis”.
La UAGro siempre se ha mostrado solidaria en los momentos más difíciles que ha enfrentado el pueblo de Guerrero. Lo vimos en septiembre de 2013 cuando los huracanes “Ingrid” y “Manuel” causaron graves afectaciones a varias regiones de la entidad, en 2021 y 2022 durante la emergencia sanitaria por Covid-19 y hace unas semanas cuando el huracán “Max” afectó a varios municipios de la región de la Costa Grande.
Este viernes, el rector Javier Saldaña Almazán dio un mensaje a la comunidad universitaria y a los guerrerenses en el auditorio de la Rectoría en Chilpancingo, donde informó de las siete acciones de la UAGro en apoyo a los damnificados por el huracán “Otis”.
Señaló que la máxima casa de estudios de la entidad forma parte del Consejo Estatal de Protección Civil, encabezado por la gobernadora Evelyn Salgado Pineda y junto al gobierno federal y la Guardia Nacional, fue instalado el Mando para la Atención de Afectados por “Otis”.
Acompañado por la secretaria general, Berenice Illades Aguiar, funcionarios de la administración central, consejeros universitarios, directores de Facultades y maestros, Saldaña Almazán anunció la habilitación de albergues temporales, en espacios universitarios seguros, así como centros de acopio para la recolección de víveres en escuelas y facultades de la UAGro que ya están funcionando gracias a la respuesta inmediata de los universitarios.
También se integrarán brigadas multidisciplinares de apoyo y atención a la ciudadanía afectada, entre ellos, médicos, enfermeras, odontólogos, psicólogos, ingenieros y arquitectos. Y se sumarán médicos veterinarios para atender animales y habrá brigadas que ayudarán con la limpieza y el saneamiento.
La rehabilitación de comedores universitarios para brindar alimentos calientes, es uno de los principales anuncios que hizo el rector Javier Saldaña.
“Es momento de ayudar, de solidarizarnos con nuestros hermanos guerrerenses que lo necesitan urgentemente; la UAGro ha despertado y ya no es la universidad de antes que ante estos desastres permanecía inmóvil. Me duele mucho lo que le ha pasado Acapulco, pero nos levantaremos”, dijo.
Por el momento, hay saldo blanco, ya que no hay reportes de que algún universitario haya perdido la vida.
En donde sí se registraron serios daños, fue en la infraestructura de los 40 centros de trabajo (escuelas y facultades de Acapulco), algunas con mayores daños que otras. Y la evaluación de las afectaciones continúa, porque se perdieron techados, muebles de oficina, bardas perimetrales, portones y fachadas.
Respecto a las actividades académicas en Acapulco, el rector Javier Saldaña informó que seguirán suspendidas, porque lo más importante en este momento es proteger a los universitarios y estudiantes de Acapulco.
La solidaridad de la UAGro con los damnificados por el huracán “Otis” se refleja con acciones y no con discursos. Y eso refleja el lado humano de la comunidad universitaria y su líder Javier Saldaña Almazán.
ENTRE OTRAS COSAS… En lugar de pelear y buscar culpables por la devastación generada por “Otis”, los dirigentes partidistas deberían sumar esfuerzos para que pronto lleguen recursos para la reconstrucción de Acapulco.
Los pleitos estériles y las pachangas no le ayudan en este momento a Acapulco y a sus habitantes. Y los actos de rapiña, menos.
Comentarios:
efrain_flores_iglesias@hotmail.com