Morena, “Jacko” y el Congreso local

Por: Efraín Flores Iglesias

En lugar de velar por mantener la gobernabilidad en el Poder Legislativo y establecer una auténtica división y equilibrio de poderes, la fracción parlamentaria de Morena pretende por todos los medios imponer en la Mesa Directiva a uno de sus miembros.

A los legisladores de Morena no les importa violar la Ley Orgánica del Poder Legislativo del Estado de Guerrero. Lo único que les interesa es tener el control del Congreso local.

Su menosprecio a la ley es más que evidente. Quieren todo.

No se conforman en presidir la Junta de Coordinación Política (Jucopo), a través de la diputada Yoloczin Domínguez Serna, quien al igual que sus predecesores en el cargo, sólo se ha distinguido por su soberbia y por utilizar a la Dirección de Comunicación Social del Congreso para promocionar su imagen con miras a la próxima elección.

En la sesión del pasado 14 de junio intentaron sin éxito que Joaquín Badillo Escamilla, mejor conocido como “Jacko”, fuera elegido presidente de la Mesa Directiva para el Tercer Año de Ejercicio Constitucional.

Se realizaron dos votaciones. Y en las dos perdió Jacko Badillo, el empresario, el cazador de crías de tiburón… el chapulín político por excelencia.

La sesión culminó en las primeras horas del jueves 15 de junio. Y en dos ocasiones 22 diputados votaron en contra, 20 a favor y tres se abstuvieron.

Seis días antes y de manera sorpresiva, el legislador de marras anunció a la Mesa Directiva que deja la bancada de Morena para sumarse a la del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), representación parlamentaria que sólo contaba con una diputada (Hilda Jenifer Ponce Mendoza).

Fue un plan con maña. Pero el tiro le salió por la culata.

El pargo (especie de pez perciforme de la familia Sparidae) quiso comerse a los tiburones del PRI y del PRD, pero al final el devorado fue él.

“El pargo no jaló”, se burlaron algunos legisladores esa noche de intenso debate.

Jacko Badillo creyó que sería fácil burlarse de los legisladores de oposición y de la ley.

La dirigencia estatal del PVEM no envió un oficio para informar que aceptaba al legislador tránsfuga en su representación. De hecho, el señor Badillo Escamilla tampoco renunció a su militancia en Morena.

Por lo tanto, es inelegible para presidir la Mesa Directiva. Además de que ninguno de los diputados que pertenecen al grupo parlamentario del diputado que presida la Jucopo podrá ser presidente de la Mesa Directiva del Congreso del estado.

Así lo establece la Ley Orgánica del Poder Legislativo del Estado de Guerrero número 231 en su artículo 122, cuarto párrafo.

La misma Ley señala que en la integración de la Mesa Directiva se deberán considerar los principios de proporcionalidad, paridad y pluralidad (artículo 123).

Aunque no siempre coincida con sus posturas en tribuna y estilo de hacer política, reconozco que los diputados Bernardo Ortega Jiménez (PRD) y Héctor Apreza Patrón (PRI) se pronunciaron a favor de respetar la ley, sin que se pretenda cometer un “agandalle” y que Jacko Badillo es inelegible para ser presidente de la Mesa Directiva al ser militante de Morena.

Y a la presidenta de la Jucopo, Yoloczin Domínguez Serna, le pidieron hacer entender a su compañero de partido que no puede presidir la Mesa Directiva.

En el oficio que envió el 8 de junio a la presidenta de la Mesa Directiva, la perredista Yanelly Hernández Martínez, el diputado Joaquín Badillo Escamilla señala:

“El que suscribe, C. Joaquín Badillo Escamilla, diputado integrante de la Sexagésima Tercera Legislatura de este H. Congreso del Estado de Guerrero, electo diputado local por el distrito IX del partido MORENA, correspondiente a Acapulco de Juárez, con fundamento en lo dispuesto por los artículos 23 fracción I, 156, tercer párrafo y demás relativos y aplicables de la Ley Orgánica del Poder Legislativo número 231, me permito hacer de su conocimiento, que por acuerdo institucional entre los partidos que formamos la alianza histórica “Unidos Hacemos Historia” hemos decidido (sic) separarme de mi actual grupo parlamentario, a partir de esta fecha, lo anterior con el objeto de que se haga del conocimiento del Pleno de esta Legislatura para los efectos legales a que haya lugar…”.

¿Y quiénes integran la alianza histórica “Unidos Hacemos Historia”? Pues Morena, el PT y el PVEM.

Luego entonces, el PT y el Verde sabían de la perversa estrategia de Morena.

En política no hay casualidades, sino causalidades.

A Jacko Badillo le dieron la instrucción de separarse un rato de Morena y refugiarse en el PVEM, con el único objetivo de que Morena tenga el control absoluto del Poder Legislativo.

Morena ya tiene el control de dos poderes públicos: el Ejecutivo y el Judicial. Sólo le hace falta el Legislativo.

Y el que preside la Mesa Directiva es en automático el presidente del Congreso del estado y el que tiene la representación institucional y protocolaria del Congreso del estado ante los Poderes de la Federación, las entidades federativas, el Ejecutivo y el Judicial del Estado, así como ante los Ayuntamientos y demás entes, órganos e instituciones públicos o privados.

Legalmente, el presidente de la Mesa Directiva pesa más que el presidente de la Jucopo. Y el que sabe aprovechar bien los reflectores, tiene la posibilidad de crecer políticamente.

Al igual que Yoloczin Domínguez, Jacko Badillo aspira ser presidente municipal de Acapulco en 2024 a través de Morena. Lamentablemente, ni uno de los dos representa un proyecto serio que beneficie a los acapulqueños. La primera porque no tiene estatura política y por privilegiar más la frivolidad y las selfies, y el segundo porque es un saltimbanqui de la política y por su ambición desmedida por el poder.

Los diputados tienen como límite el 19 de julio para integrar y designar a la Mesa Directiva para el Tercer Año de Ejercicio Constitucional

Veremos quién sale electo como presidente de tan importante órgano del Congreso local.

Ojalá se respete la ley y no haya avasallamiento.

Comentarios: efrain_flores_iglesias@hotmail.com

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