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París, Francia, Luis Díaz para lo bueno y para lo malo. Inició el colombiano con elevadas revoluciones en el Parque de los Príncipes y así se encaminó a los vestidores antes de tiempo. Apenas a los cuatro minutos puso en ventaja al Bayern Múnich ante el PSG, dos pesos pesados de Europa. Menos de media hora después, Díaz aprovechó un grave error de Marquihnos para su doblete, pero antes del descanso el delantero cafetero entró con fuerza al tobillo de Hakimi, que se fue lesionado, y el árbitro le mostró el cartón rojo tras revisar el VAR.
Fue un encuentro con tensiones y emociones. Dos colosos europeos, el campeón PSG y el siempre poderoso Bayern Múnich, ambos con registros impecables. El Bayern se fue con el botín de París y elevó a 16 sus victorias en fila en todas sus competencias.
Desde el inicio, el Bayern mordió alto, presionando sin contemplaciones, marcas que se cerraban, transición veloz. Cuando el balón le cayó a Luis Díaz en el minuto 4, la red del PSG se estremeció: 1-0 para los germanos. Y en el minuto 32 repitió con brillantez: 2:0. E Bayern llegó a la capital de Francia con la maquinaria.
Pero la noche no sería perfecta. Con Díaz expulsado, las charlas tácticas sirvieron para plantear modificaciones.
El Bayern, con diez, resistió. En la segunda parte, el PSG empujó, buscó, metió al adversario en su área. Finalmente, en el minuto 74, emergió João Neves para recortar y poner el 2-1, pero el golpe ya estaba dado.
La atmósfera cambió. El PSG dominó terrenos, el Bayern soltó instantes de nervios, pero también aplomo. El experimentado portero Manuel Neuer salió a la palestra para contener el empate. Al final, el Bayern se marcha de París con la victoria y mantiene su invicto. La derrota duele para el equipo que tiene la Orejona. Y para los alemanes, es otra prueba de que ahora mismo están en un pico notable.