Por: IRZA
El presidente Andrés Manuel López Obrador negó que desde su gobierno se hayan utilizado bots en redes sociales para dañar la autoridad moral de la Iglesia católica en México, utilizando el caso del obispo emérito de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza. El lunes 29 de abril por la mañana la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) declaró que el obispo Rangel Mendoza se encontraba desaparecido desde el sábado anterior.
Pero horas después se informó que el sacerdote fue ubicado en el Hospital General “Dr. José G. Parres”, de Cuernavaca, Morelos, después de que fue encontrado en el interior de una habitación del motel Real de Ocotepec, cerca de la misma capital de esa entidad federativa. En tanto, el fiscal general del estado de Morelos, Uriel Carmona, decía que el obispo habría sufrido de un “secuestro exprés” y que sus captores le vaciaron sus cuentas bancarias utilizando las tarjetas de crédito del mismo prelado.
Casi inmediatamente después de las declaraciones del fiscal, el comisionado estatal de Seguridad Pública de Morelos, José Ortiz Guarneros, aseguró que el obispo fue encontrado drogado e inconsciente en el interior de una habitación del motel Real de Ocotepec, cerca de Cuernavaca, hospedería en la que habría llegado acompañado por otro hombre. Esto último más el supuesto de que en la habitación en la que hallaron a Rangel se habían encontrado drogas, “gel íntimo” y hasta condones, fue relacionado en redes sociales con la sexualidad del obispo Rangel.
Esta última versión es la que prevaleció en las redes sociales por internet, especie que el domingo 5 de este mes fue rechazada por el secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano y obispo de Cuernavaca, Ramón Castro Castro. El mismo Castro Castro afirmó que “miles de bots, personas interesadas en dañar la autoridad moral de la Iglesia, han visto la oportunidad, miles, miles. Es una fábrica de bots de ya saben quién”, en una posible referencia al presidente Andrés Manuel López Obrador.
Es decir que, según Castro Castro, el mandatario mexicano sería el autor intelectual de los ataques, vía internet, contra el obispo Rangel para desprestigiar a la Iglesia Católica, para restarle autoridad moral en medio del actual proceso electoral en el que está en juego la Presidencia de la República, nueve gubernaturas, senadores, diputados federales, entre otros cargos. Ante los señalamientos del obispo de Cuernavaca y secretario de la CEM, el presidente López Obrador dijo la mañana de este lunes que su gobierno “es muy respetuoso de todas las iglesias y en especial de la Iglesia católica y no estamos acostumbrados a mentir”.
Agregó que en su administración siempre se actúa “con apego a la verdad y de ninguna manera nos proponemos hacerle mal a nadie y se incluye el respeto a las instituciones que tienen que ver con el ejercicio de la fe, de la espiritualidad”. “No afectamos, no nos oponemos, no estamos en contra de ninguna religión; somos defensores de la libertad de creencia y por lo mismo si alguien dijo eso, respeto su derecho a decirlo, pero puedo asegurar que nosotros no actuamos de manera hipócrita, nosotros somos congruentes y vamos a seguir actuando de esa forma”, aseveró López Obrador.
Precisó que aun cuando estemos en una época electoral “no vamos a permitir que nos confronten (a la Iglesia católica y a su gobierno), amor y paz; sé que están desesperados los del bloque conservador y son capaces de todo, no de todo, pero sí de mentir y de calumniar, eso sÍ me consta”. Este domingo los obispos de Guerrero emitieron un comunicado para solidarizarse con el obispo emérito, Salvador Rangel Mendoza y rechazaron “todo acto de violencia, los derechos y la vida” del prelado católico.