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Estados Unidos. Un estudio publicado en la revista Addiction ha arrojado datos alarmantes sobre la crisis de sobredosis en Estados Unidos. Según esta investigación liderada por la Universidad de California-Los Ángeles (UCLA), la proporción de muertes por sobredosis de fentanilo combinado con estimulantes ha aumentado de manera dramática. Entre 2010 y 2021, esta proporción se disparó de un modesto 0.6% a un impactante 32.3% de todos los fallecimientos relacionados con sobredosis.
Joseph Friedman, autor principal del estudio e investigador en la Escuela David Geffen de Medicina en UCLA, advierte que el fentanilo se ha convertido en una fuerza dominante en la crisis de sobredosis en EU. No solo eso, sino que ha inaugurado una crisis de polisustancias, donde las personas combinan el fentanilo con diversos estimulantes y sustancias sintéticas, generando nuevos retos para el personal sanitario.
La mezcla de opioides como el fentanilo con estimulantes y otras drogas plantea graves riesgos para la salud y dificulta la estabilización médica de quienes luchan contra el uso de polisustancias. El sistema de atención médica enfrenta desafíos considerables para abordar esta nueva dimensión de la crisis de sobredosis.
Olas de la crisis de opioides en EU
El estudio también ofrece una perspectiva histórica de la crisis de opioides en Estados Unidos. Se identifican cuatro olas significativas:
Primera ola (comienzos de la década de 2000): Aumento en las muertes por opioides bajo receta.
Segunda ola (2010): Incremento en las muertes relacionadas con la heroína.
Tercera ola (alrededor de 2013): Aumento de sobredosis de fentanilo.
Cuarta ola (desde 2015): Sobredosis de fentanilo combinado con estimulantes.
Un dato preocupante es que para el año 2021, los estimulantes como la cocaína y las metanfetaminas se han convertido en las drogas más comunes involucradas en sobredosis en las que el fentanilo está presente en todos los estados de EU. Esta tendencia marca la «cuarta ola» en la prolongada crisis de sobredosis de opioides en el país, y el saldo mortal sigue en ascenso.
La situación se complica aún más debido a que las personas que consumen múltiples sustancias tienen un mayor riesgo de sobredosis. Además, muchas de las sustancias mezcladas con fentanilo no responden al antídoto convencional para las sobredosis de opioides, la naloxona.