Saldaña, la UAGro y los frustrados de siempre

Por: Efraín Flores Iglesias

En su libro “Las 28 reglas de oro de la estrategia electoral” (Editorial Porrúa, México, 2014), Ricardo Homs señala que “para ser un candidato competitivo es necesario construir un posicionamiento que se convierta en el eje de la identidad personal”.

Y es algo que no solamente aplica en una elección constitucional en donde participan partidos políticos o coaliciones electorales, sino también en una elección de dirigentes sindicales, empresariales y campesinos, así como en la elección de rectores de universidades públicas.

Un candidato no surge de la noche a la mañana. Y antes de iniciar campaña, el aspirante a un cargo de elección debe hacer labor social y generar una vinculación de confianza, afecto y respeto con los electores.

Lamentablemente, no todos los que buscan un cargo hacen labor social con antelación, sino que se aparecen solamente en tiempos electorales y utilizan como estrategias el golpeteo mediático y la guerra sucia en las redes sociales contra el candidato favorito de las mayorías.

Lo estamos viendo en este momento en la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro). Un grupúsculo de catedráticos y gente externa de la máxima casa de estudios de la entidad pretenden ensuciar la elección con su guerra de lodo en contra del aspirante con más peso político y electoral: el Dr. Javier Saldaña Almazán.

Los adversarios de Javier Saldaña están frustrados y peleados con la vida. Se pelean hasta con su propia sombra. Y se entiende. No tienen posibilidades de ganar la elección del próximo 25 de mayo.

Una elección se gana con propuestas, estrategia, estructura y votos. Quien no lo entienda de esa manera, está condenado a perder siempre.

Y en un proceso electoral hay reglas que se tienen que respetar, como por ejemplo los requisitos que establece la convocatoria para poder ser candidato.

El Dr. Javier Saldaña cumplió con los 20 requisitos de la convocatoria publicada el pasado 21 de marzo por la Comisión Electoral del Honorable Consejo Universitario, y por esa razón los ocho integrantes de dicho órgano aprobaron su solicitud de registro este fin de semana. No así los de la Dra. Silvia Alemán Mundo y del maestro Jorge Luis Urióstegui Traín, quienes no cubrieron los requisitos establecidos en la convocatoria.

Javier Saldaña, quien busca un tercer periodo como rector de la UAGro, logró el respaldo de 196 consejeros universitarios.

Uno de los requisitos de la convocatoria establece que los aspirantes deben acreditar el reconocimiento y aval de al menos 25 consejeros universitarios que avalan su aspiración y reconocen que tienen los méritos para su postulación al cargo de Rector.

Silvia Alemán y Jorge Luis Urióstegui no lograron el reconocimiento y aval de ningún consejero universitario. Tampoco el de 12 Unidades Académicas ni el reconocimiento y aval de 93 consejeros académicos de Unidades Académicas.

La convocatoria fue publicada en tiempo y forma. No contraviene la Ley Orgánica de la Universidad Autónoma de Guerrero número 178, el Estatuto General, el Reglamento del Honorable Consejo Universitario ni el Reglamento Electoral. Y tampoco se contrapone a lo que mandata la Constitución Política federal.

Es claro que los aspirantes rechazados intentarán junto con sus abogados pelear en los tribunales, como lo han venido haciendo desde hace cuatro años. Pero olvidan que la UAGro es una universidad pública que goza de la protección constitucional para elegir con total autonomía a sus autoridades.

Como cada cuatro años, los universitarios serán los que elegirán al próximo rector. Y será mediante el voto directo, universal, secreto y libre de coacción.

Este lunes inicia formalmente la campaña a rector, pero el pasado viernes quedó claro –después de su registro ante los integrantes de la Comisión Electoral–que la mayoría de los universitarios (alumnos, trabajadores administrativos y académicos, y directivos) respaldan el proyecto político-académico del Dr. Javier Saldaña Almazán.

Más de 20 mil universitarios marcharon por las principales calles y avenidas de Chilpancingo para manifestarle su apoyo al también Maestro Emérito de la UAGro.

El oriundo de Santa Bárbara proviene de la cultura del esfuerzo. Y después de haber estado al borde de la muerte por contagiarse de Covid-19 en 2020, regresó más fuerte que nunca.

Si tiene el apoyo de la Comunidad Universitaria es porque en sus dos periodos como rector la UAGro se consolidó como una de las mejores universidades públicas del país. La infraestructura de las Unidades Académicas mejoraron y se incrementó, diversificó y mejoró la oferta educativa del posgrado.

También se incorporaron más investigadores al Sistema Nacional de Investigadores (SIN). Y en materia de transparencia y acceso a la información, la UAGro dio pasos agigantados.

Sus adversarios nunca reconocerán los avances que ha tenido la UAGro en los últimos diez años, porque para ellos todo está mal. Es por eso que recurren a personajes externos para que los pastoreen.

La guerra sucia en su contra seguirá en las redes sociales. Ojalá eso no lo distraiga en su campaña y se enfoque en seguir haciendo propuestas para que a la máxima casa de estudios le vaya bien en los próximos cuatro años.

ENTRE OTRAS COSAS… Durante su sesión ordinaria de este sábado en la Ciudad de México, la Coordinación Ciudadana Nacional del partido Movimiento Ciudadano designó al acapulqueño Julián López Galeana como su nuevo dirigente en el estado de Guerrero, quien sustituye en el cargo a Adrián Wences Carrasco, quien durante varios años dirigió a ese instituto político.

La renovación generacional es un hecho en MC, contrario al PRI que sigue apostándole a las mismas caras de siempre.

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