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Ciudad de México, La jugada es un accidente del futbol, pero siempre la mala suerte envuelve a José Juan Macías. En el partido anterior de la fecha 17, la última de un torneo en el que parecía volver a encontrarse con el goleador que era, salió en camilla de nuevo.
Una jugada en medio campo de disputa de balón influyó en su lesión. Su compañero Iván Angulo trabó por la espalda a Paradela quien perdió el equilibrio y le cayó encima a José Juan Macías directamente en la rodilla izquierda.
El jugador de Pumas, siempre ensombrecido por el espectro de las lesiones, volvió a salir con ayuda médica del campo y con el peor panorama. De tal forma, se ha confirmado lo peor para él: ruptura completa de ligamento cruzado anterior, ruptura de ligamento colateral medial y ruptura de menisco medial. Estará fuera de actividad al menos nueve meses.
La tragedia es una cruz gamada que carga José Juan Macías, un talentoso jugador de 25 años, pero que ha pasado más de la mitad de su carrera en el lecho rehabilitandose. Es la sexta lesión que sufre y que hace reflexionar sobre la mala suerte y porvenir que siempre tiene.
Aproximadamente, José Juan Macías ha perdido dos años de su vida ftubolística en las lesiones, unos 74 partidos que se le han escapado por estar en recuperación, ahora por delante le quedan nueve meses más cuando Pumas había confiado en él. El contrato de los felinos era por un año, pero con claúsulas de rendimiento y resistencia física. De cualquier manera, en el club han avisado que no lo dejarán sólo.
El problema es que gran parte de su contratación fue respaldada por el técnico Efráin Juárez, quien de irse, lo dejará en la orfandad.
En agosto pasado, Macías hizo pruebas con el Valladolid, sin embargo, al no llegar a un acuerdo económico, sobre todo porque los directivos creyeron que su fragilidad física no era una garantía, retornó a México en calidad de libre. En Pumas se arregló en un pestañeó y comenzóa revivir en su aspecto futbolístico.
Jugó 10 partidos e hizo cuatro goles además de dar un par de asistencias. Poco a poco ganó confianza y el respaldo de la afición y de los Pumas, pero otra vez el mal destino le ha vuelto a poner unadura prueba de resistencia.