Por: Netza I. Albarrán Razo
Ciudad de México, 24 de septiembre de 2025. — En México, la desconfianza y la percepción de ineficacia en el sistema de justicia continúan siendo los principales obstáculos para que las víctimas denuncien los delitos. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública del INEGI (2025), más de un tercio de la población cree que presentar una denuncia es simplemente una pérdida de tiempo.
El estudio revela que 37% de los hombres y 32.4% de las mujeres señalaron este motivo como la principal causa para no acudir ante las autoridades. A ello se suma la desconfianza en las instituciones, mencionada por 14.8% de los hombres y 13.3% de las mujeres.
Otro de los factores que desalienta a las víctimas son los trámites largos y difíciles (10.5% en hombres y 9.9% en mujeres), así como la actitud hostil de las autoridades (3.5% y 3.2%, respectivamente). Aunque en menor medida, también aparece el miedo a la extorsión, que afecta principalmente a las mujeres (1.1%) frente a los hombres (0.5%).

Otros motivos: “no valía la pena denunciar”
El informe del INEGI también arroja que para muchos ciudadanos el delito sufrido “no tenía importancia”. En esta categoría se ubicaron 13.3% de los hombres y 12.6% de las mujeres, lo que refleja una normalización preocupante de la violencia cotidiana.
Asimismo, 11.2% de las mujeres y 7.6% de los hombres aseguraron no contar con pruebas para sustentar una denuncia. En tanto, 8.2% de las mujeres y 8% de los hombres argumentaron “otro motivo” sin especificar. Finalmente, 7.5% de las mujeres y 4.5% de los hombres reconocieron no denunciar por miedo directo a su agresor.

Un círculo de impunidad
Las cifras exhiben un círculo vicioso, la falta de confianza en las autoridades provoca que los delitos no se denuncien, y la ausencia de denuncias alimenta la impunidad. Especialistas advierten que, mientras el sistema no garantice atención ágil, trato digno y seguridad a las víctimas, la mayoría seguirá optando por el silencio.
En un país donde ocho de cada diez delitos quedan impunes, la percepción ciudadana descrita en la encuesta refleja un reto mayúsculo, reconstruir la confianza en la justicia para romper la espiral de desánimo y resignación que hoy mantiene a México como uno de los países con mayor subregistro de delitos en el mundo.