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Budapest, Hungría., Lewis Hamilton atraviesa una de sus temporadas más difíciles desde que debutó en la Fórmula 1. Ahora como piloto de Ferrari, el siete veces campeón del mundo ha enfrentado más frustraciones que logros, y el reciente Gran Premio de Hungría dejó en claro lo complicada que está siendo su adaptación al equipo italiano.


Después de quedar eliminado en la Q2 de la clasificación y ver cómo su compañero Charles Leclerc lograba la pole, el británico estalló con una declaración que encendió las alarmas: “Ferrari debería buscar a otro piloto, yo soy el problema”.


La autocrítica del piloto más exitoso en la historia de la F1 sorprendió tanto a sus seguidores como a sus excompañeros. Sin embargo, el primero en salir a su defensa fue Toto Wolff, jefe de Mercedes y alguien que conoce a Hamilton mejor que nadie en el paddock.


WOLFF: “LEWIS ES EL MEJOR Y NADIE LE QUITARÁ ESO”
El jefe de Mercedes aseguró que las palabras del británico nacieron desde la emoción del momento y no reflejan su verdadero valor como piloto. “Ese fue Lewis hablando desde el corazón. Fue lo que pensó exactamente después de una sesión complicada. Se va a castigar a sí mismo, pero es el mejor de todos los tiempos y siempre lo será, y nadie va a quitarle eso”, afirmó Wolff ante la prensa.


Aunque ya no trabajan juntos, Toto dejó claro que mantiene una gran admiración por Hamilton y que no duda de su talento, incluso en medio de una tormenta emocional y deportiva.


“NO DEBE RETIRARSE; LE QUEDAN ASUNTOS PENDIENTES”
Además, Wolff fue tajante al asegurar que Hamilton no debería pensar en el retiro. A su juicio, el próximo año puede marcar un nuevo comienzo con la llegada de los autos y motores de nueva generación que cambiarán por completo la dinámica de la Fórmula 1.


“Lewis tiene asuntos pendientes. Mercedes no estuvo a la altura desde 2022 con los autos de efecto suelo, y él nunca se sintió cómodo con esa normativa. El próximo año será distinto, con coches y motores nuevos. Eso requiere inteligencia y experiencia, y él tiene ambas”, concluyó.


Hamilton, con 39 años, podría estar atravesando un bache emocional, pero voces como la de Wolff aseguran que su historia en la F1 todavía no está cerca de terminar.