Vicky Barrios
Iguala, Gro., Con el objetivo de sensibilizar a la población sobre el autismo, este miércoles se llevó a cabo una caminata en la que participaron alumnos de diversas instituciones educativas, personal de USAER de Iguala y Teloloapan, organizaciones y regidores. El evento fue coordinado por Zuleyda Pineda Solorio, directora de Inclusión Social.
El Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo se celebra cada 2 de abril desde 2008, tras ser establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 18 de diciembre de 2007. Desde su primera conmemoración, esta fecha ha servido para destacar las contribuciones de las personas con autismo en diversos ámbitos de la sociedad, como el hogar, el trabajo, las artes y la elaboración de políticas públicas.

La marcha inició en la Patria Trigarante, continuó por la Avenida Bandera Nacional, siguió por Juárez y retornó en Reforma hasta llegar al monumento, donde se entregaron reconocimientos a los participantes. En ese espacio, madres de familia compartieron sus historias de vida junto a sus hijos con autismo, pidiendo a la población respeto, empatía y una mayor inclusión, sin juzgar sin conocer la condición de cada persona.
Zuleyda Pineda Solorio explicó que el autismo no tiene cura, pero eso no significa que no haya aspectos que atender. La falta de lenguaje, la discapacidad intelectual y el insomnio son alteraciones de origen patológico que siguen siendo objeto de investigación.
«Como sociedad, debemos educarnos sobre el autismo, conocer más sobre esta condición y ser más empáticos, siempre desde una mirada científica, ya que solo la ciencia busca las posibles causas y tratamientos que pueden ayudar a los niños», afirmó.

Asimismo, señaló que la frase «El autismo no es una tragedia, la tragedia es la ignorancia» no siempre es correcta. «El autismo sí puede ser una tragedia para aquellos padres cuyos hijos tienen autismo severo y sufren crisis que los llevan a golpearse hasta sangrar. Es una tragedia cuando, por la falta de un tratamiento adecuado, los comportamientos agresivos contra los padres y cuidadores se convierten en un peligro que amenaza la vida de todos», expresó.
Finalmente, Pineda Solorio destacó que el objetivo del evento se cumplió, ya que, durante la caminata, varios negocios se solidarizaron colocando globos azules. «Es importante abrir caminos y romper barreras. No fue solo una caminata, es un cambio para mirar con otros ojos, escuchar con el corazón y, sobre todo, actuar con compromiso», concluyó.